
LAJAS, Cienfuegos.—Pasalodos es un pequeño asentamiento rural conformado por seis núcleos familiares independientes, situado en una zona del municipio de Lajas alejada de casi todo. Lo más cercano que tiene es, a través de un camino, el kilómetro 230 de la Autopista Nacional. Por tales condiciones, era uno de los pocos sitios de Cienfuegos carentes de electrificación.
Pero ya, al fin, la luz llegó a este grupo de hogares aislados, gracias al programa de electrificación con paneles fotovoltaicos independientes, que en la provincia alcanzan las 560 moradas asistidas y, específicamente en el municipio de Lajas, las 52.
Los habitantes de Pasalodos no caben en sí de la felicidad. Son campesinos que llevaban años ahorrando, a la espera de este momento, y todos (salvo el anciano Juan Pablo Mena Rodríguez, de 80 años, quien no cuenta con los recursos para permitírselo) se compraron su «plasma» para ver la televisión.
Lourdes Reyes Morales y su esposo Víctor Cruz Rodríguez, a cuyo lado lleva 36 años, le narraron a Granma cómo la única forma de ver el noticiero o la novela hasta ahora consistía en acudir a una lejana sala de video, de noche y por el medio del camino real.
A la vecina Niuris Pérez León los ojos se le humedecían cuando iba a Lajas y escuchaba a las mujeres hablar del capítulo de la telenovela exhibido la noche anterior.
Se alelaba Niuris con aquellas historias que ahora puede ver tranquilamente en su hogar, a través del televisor de 32 pulgadas que compró, para disfrutar en compañía de su compañero Oxide Rodríguez Rodríguez y el hijo de ella, Duvier Rivero Pérez.
«Para nosotros, que nos aburrimos mucho después de las cuatro de la tarde, el asunto de la televisión es importante; pero la luz de los paneles no solo resuelve eso, sino además nos permite escuchar música e informaciones por la radio y, sobre todo, no tener que “pegar” a cocinar tan temprano (gracias a las lámparas) y evitar prender la chismosa a las seis de la tarde», afirma Niuris.
«Es que la vida nos ha cambiado, para bien, en todo —complementa su vecina Lourdes—. La casa está clarita con las cinco lámparas LED. Todo está iluminado; es como si a un ciego le devolvieran la vista.
«El día que nos colocaron los paneles nuestras hijas de Lajas vinieron con un pernil de puerco, nos dijeron que no cocináramos nosotros, que eso había que festejarlo. Fue el nacimiento de algo muy lindo», dice Víctor.
Juan José Sánchez Pérez, presidente de la Asamblea Municipal del Poder Popular de Lajas, significa que «este era un viejo anhelo reclamado durante muchos años en las asambleas de rendición de cuenta de la circunscripción 16, el cual satisface muchas necesidades y eleva la calidad de vida de los pobladores».
Alfredo Castro López, director de Operaciones de la Empresa Eléctrica provincial, explica que los dispositivos fotovoltaicos están compuestos por un módulo fotovoltaico de 250 watts, dos baterías de 12 volt y un set de caja de control integrado por un regulador de carga solar, un gabinete y un equipo inversor.
Además, contemplan un paquete con los accesorios de instalación, conformado este por cinco cables, para lámparas, de 3, 6, 9, 12 y 15 metros de extensión; un cable de conexión de diez metros de la caja de control al panel; un destornillador y cinco luminarias LED, de nueve watts.
La energía generada por los paneles permite el encendido de las mencionadas cinco lámparas, un televisor LED, radio y equipo de audio.
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Jorge Nesrala M. dijo:
1
7 de marzo de 2017
04:52:21
Yoandrys dijo:
2
7 de marzo de 2017
12:10:46
denia martinez vega dijo:
3
7 de marzo de 2017
12:20:01
Carlos Aguilera Aguilar dijo:
4
7 de marzo de 2017
16:02:24
Miguel Angel dijo:
5
8 de marzo de 2017
08:16:46
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