ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
Los especialistas recién graduados muestran una alta profesionalidad. Foto: Leidys María Labrador Herrera

LAS TUNAS.—Muchos son los pilares en los que se sustenta el sistema de salud cubano. No se trata solo de los principios humanistas que lo distinguen, sino de los procesos que garantizan la estabilidad y calidad de los servicios. La formación de especialistas es, sin duda, una de las prioridades en función de tales objetivos.

Ciertos procesos como la migración, el envejecimiento, los programas para el robo de cerebros, la solicitud de bajas por motivos personales y el cumplimiento de los compromisos con otras naciones, generaron un déficit de personal especializado para enfrentar las ciencias particulares que comprende la Medicina. Ante esta situación, el país puso en marcha estrategias que permitan responder, paulatinamente, a las necesidades existentes al respecto.

El balcón del oriente se insertó de forma activa en este proceso, y mientras en un lado de la balanza pesan grandes retos, en el otro, ya se acumulan resultados.

EL PRIMER PASO

El plan de formación de especialistas tiene varias premisas. En primer lugar está dirigido a los Médicos Generales Integrales y a los estomatólogos con igual categoría.

Luego, los egresados ubicados en zonas de difícil acceso que no han tenido la posibilidad de matricular en estas especialidades, los desmovilizados del Minint y los diplomantes que regresan de una misión internacionalista con evaluaciones satisfactorias.

Las plazas que no se cubren por estos conceptos, se les otorgan de manera excepcional a los estudiantes que están en el quinto año de Estomatología y sexto de Medicina, por la denominada vía directa.

Sin embargo, desde hace dos cursos, el Ministerio de Salud Pública decidió retomar una modalidad que había dejado de aplicarse, pero que se ajusta a las condiciones actuales. Se trata del internado vertical. Al respecto comentó Lidia María Ortiz González, directora de posgrado de la Universidad de Ciencias Médicas de Las Tunas.

«El internado vertical es una modalidad que permite responder, por lo general, a necesidades del territorio, o sea, especialidades que muestran un déficit de recursos humanos. La cantera fundamental es el movimiento de alumnos ayudantes Frank País, con un índice académico elevado, con integralidad probada y en el otorgamiento participan factores como la UJC y la FEU».

La verticalización consiste en pasar el último año de la carrera vinculado a una especialidad. La modalidad tiene un programa que se relaciona mucho con el contenido del primer año de la formación del especialista, por lo tanto, una vez graduado, ese joven tiene la posibilidad de avanzar en su especialidad y concluirla en menor tiempo, sin que ello afecte la calidad de su formación.

Experiencias como la del joven Jorge Luis Rodríguez Utria, residente de primer año de Obstetricia y Ginecología, avalan la pertinencia de esta decisión.

«Es una oportunidad muy buena para aquellos que aman una especialidad. Otros elementos muy positivos tienen relación con la tutoría, con las oportunidades que brinda la universidad para el estudio y sobre todo, porque la amplitud de los programas te permite avanzar mucho, en muy poco tiempo».

ELEMENTOS INDISPENSABLES

Un adecuado proceso de otorgamiento, el sacrificio y la disposición del residente o el escenario docente, no resultan suficientes para la preparación integral de un especialista. Existen aseguramientos materiales y de capital humano que no pueden despreciarse.

En este sentido se ha trabajado intensamente en el Hospital General Docente Dr. Ernesto Guevara de este territorio, que asume hoy la formación de 268 residentes.

Sobre este particular conversó con Granma el doctor Rabiel Cárdenas Peña, especialista de primer grado en Obstetricia y Ginecología y jefe del departamento de Docencia e Investigaciones.

«Actualmente tenemos un claustro de 280 profesores, de los cuales 31 ostentan la categoría de auxiliares y nueve, de gran experiencia, son consultantes. También hemos acreditado cursos para la categorización del personal, y tenemos en marcha un doctorado en Ciencias Pedagógicas y uno en Ciencias Particulares de la salud».

No obstante, ciertas especialidades presentan hoy una situación crítica en materia de personal docente, aspecto que también señaló el doctor Cárdenas.

«Nosotros tenemos lo que llamamos especialidades anémicas por el poco personal con el que cuentan, ese es el caso de Colonoproctología, Quemados, Gastroenterología, Anatomía Patológica, Endocrinología, Nefrología y Geriatría que nos preocupan doblemente, porque solo cuentan con un profesor y un residente. Hay otras especialidades cuya demanda es cada vez más creciente, ese es el caso de Cirugía, Anestesiología y Reanimación y Obstetricia y Ginecología».

A pesar de estas dificultades, en el centro se graduaron 61 nuevos especialistas durante el 2016, constituyendo un impulso invaluable a los servicios hospitalarios.

EL CAMINO DIARIO HACIA LA META

Más allá de la modalidad por la cual se accede a una especialidad, o el conocimiento que a lo largo del pregrado se adquiera de ella, solo al enfrentarse de forma directa con las dinámicas de trabajo se conoce realmente de qué se trata. Por ello son vitales las estrategias empleadas en cada servicio, para garantizar que los residentes se identifiquen con la que será su profesión.

Mayelín Suárez Tristá, especialista de primer grado en Cirugía General, explicó que los residentes tienen un sistema de formación que se establece desde que llegan al servicio, sobre todo los que hicieron su internado vertical en la especialidad.

«Están ubicados por grupos básicos de trabajo y el profesor jefe de ese grupo es quien los atiende de forma directa, pero además existen dos profesores que los apadrinan por año y se les monta un sistema de trabajo donde existen varios escenarios docentes como el salón, los pases de visita, las guardias médicas, las consultas externas y otras estrategias, que nos permiten evaluarlos constantemente».

Para el experimentado profesor asistente, especialista en primer grado de Anestesiología y Reanimación y en segundo grado de Medicina Intensiva, Martín Víctor Tejeda Mariño, existen elementos tan vitales como las habilidades teóricas y prácticas.

«Además del sistema de evaluación que ellos tienen en su programa, hay otros aspectos con los que somos muy exigentes como la asistencia, la puntualidad, la responsabilidad ante el trabajo, porque esos valores forman parte de su formación integral».

Estos aspectos se complementan con exámenes modulares, seminarios, talleres, pases de año y rigurosos ejercicios de terminación de la especialidad. También existe el denominado plan adelanto, que parte de una solicitud personal, y da al residente la posibilidad de vencer en menor tiempo los diferentes módulos comprendidos para un curso, aunque ello implica dosis extra de esfuerzo y dedicación al estudio.

Aún falta mucho por hacer en materia de formación de especialistas, pero en este territorio no cesa la búsqueda de alternativas para garantizar que, en gran medida, ese proceso tenga lugar dentro de las instituciones locales y acorde con los parámetros establecidos.

Los nuevos tiempos traen cada vez mayores retos, pero en pos de mantener la solidez y el prestigio de nuestro sistema de salud, no se escatiman esfuerzos.

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Miguel Angel dijo:

1

8 de febrero de 2017

13:07:14


Muy interesante el trabajo de la periodistas Leidys María Labrador Herrera, aborda un tema de actualidad en el país, mas específico en la provincia de Las Tunas. Hubo en el mundo y en nuestra nación diferentes tendencias en la formación de los especialistas a partir del siglo XX. En 1978, en la Asamblea Mundial de la Salud en Alma Atá se plantea la necesidad del desarrollo de la atención primaria de salud (APS), en esa misma década en Cuba se desarrollaron los policlínicos comunitarios. En 1981 se inició la implantación del Programa del Médico y la Enfermera de la Familia como eje del sistema de salud cubano, orientado y estimulado directamente por el compañero Fidel, iniciándose en el Área de Salud del Policlínico Lawton, en La Habana, por tanto, el especialista en MGI comenzó a encontrar un mayor espacio, fortaleciéndose la APS como la base fundamental de nuestro sistema de salud y a partir de éste especialista alcanzar una segunda especialidad, por lo q existen muchos mas especialistas de MGI por cada especialista de otras. Siempre enarboló la estrategia de formar suficientes especialistas en medicina, teniendo en cuenta, no sólo las necesidades propias, sino la de colaboración en otros países, lo q se ha multiplicado en los últimos años (además de la salida de estos del SNS por otras causas mencionadas). Llama entonces la atención la carencia de especialistas q se plantea la provincia en estos momentos, pregunto, acaso no fue previsible este fenómeno, fueron sorprendidos?, fue necesaria la aparición de la crisis para actuar? Porque la formación continua del especialista en MGI (en lo personal creo q es el especialista ideal no solo para el trabajo en la APS, con una visión muy integral, q posteriormente le ofrece muchas ventajas para realizar su 2ª especialidad) nunca se detuvo, el resto de las provincias también tuvo el efecto de salida de especialistas por las causas enumeradas, aunque es cierto q cada territorio presenta sus propias particularidades. Es claro q se impone elaborar una estrategia para enfrentar el problema, q de forma eficaz está haciendo la provincia. En mi criterio, según la experiencia personal de algunos años en la formación de pre y pos grado en salud, compartida con diferentes colegas, la reaparición del especialista verticalizado no es una solución definitiva, sino "emergente", existe vasta experiencia de las consecuencias negativas de este método para preparar especialistas médicos, no es necesario decir: "Es una oportunidad muy buena para aquellos que aman una especialidad", todos los q nos formamos como especialistas amamos la especialidad, pero hay q cumplir un conjunto de etapas para llegar a ella, es una práctica universal. El resto de las variantes expresadas en la información, para la formación de especialistas como "situación emergente", son válidas. Las especialidades anémicas siempre existieron, influyen un conjunto de factores, q comienza desde la motivación del alumno en su preparación curricular como MGB, hay q trabajar desde la base para llenar estos espacios, crear vocación. Después de solucionar el problema planteado, existe consenso y suficiente experiencia en nuestro SNS para garantizar la formación de especialistas a partir del modelo del MGI, con las excepciones expresadas. Felicito a los colegas de la provincia de Las Tunas por el esfuerzo q realizan para solucionar la dificultad, pienso q en un plazo establecido recibirán los resultados esperados. Muchos éxitos. Gracias.

yohandry cruz dijo:

2

24 de febrero de 2020

02:55:57


Es creciente las dudas que trae la elección del internado al final de quinto curso de medicina, el hacer una elección acertada se vuelve una tarea compleja de la que se desprenden disímiles dudas y incertidumbres, las cuales no son apropiadamente solventadas por quien corresponda. Pero quizás la mayor de las incógnitas sea por que internado vertical y no vía directa? Soy parte de un cada vez mas creciente grupo de estudiantes y profesores de medicina que cree que en pos de una formación mas completa, un perfil mas amplio y una mayor competencia el internado rotatorio es sin duda la mejor opción. alegar la necesidad de la formación de especialistas en detrimento de su calidad, es una practica exclusiva de cuba cuando en la mayoría de países con u sistema de salud de excelencia la tendencia es a extender el tiempo de formación de sus especialista.Ademas los requisitos que aqui se menciona ya no tienen ningún valor para optar por esta vía de especialización ya que estudiante que no son alumnos ayudantes, tienen un indice académico bajo y no son para nada integrales pueden optar por el esta modalidad sin mayores trabas convirtiendo el proceso en un mero tramite, en una carrera que ya de por si a bajado sus estándares por el suelo. Puede ser claramente contraproducente esta práctica en nuestro país, que ya tiene ejemplos que avalan que "la cantidad no es calidad". Sin mas espero la presentación de algun articulo en el q se discuta este tema. gracias