Festejos por el Día del Bombero cubano

SANTA CLARA.—Trescientos veinte años después de haber sido creado en esta ciudad el primer cuerpo de bomberos de Cuba, fecha que se conmemoró este 13 de noviembre, tuvo lugar el acto de reconocimiento a esos consagrados combatientes que tan meritoria labor desarrollan en las más complejas y difíciles circunstancias.

Frente al teatro La Caridad, a cuyo costado se constituyó en 1696 por vez primera un rudimentario cuerpo de bomberos, fueron agasajados miembros de ese cuerpo y entidades destacadas en el enfrentamiento a los siniestros, además de premiarse a las provincias de Granma, Villa Clara y Santiago de Cu­ba, ganadoras de las competencias de habilidades técnicas que tuvieron lugar aquí en el marco de la jornada de celebraciones.

Durante la actividad, que estuvo presidida por las máximas autoridades del Partido y el Gobierno en el territorio, Julio Lima Corzo y Jorgelina Pestana Mederos, respectivamente, además del coronel Luis Carlos Guzmán Ma­tos, Jefe del Cuerpo de Bomberos de la Re­pública de Cuba, se dio a conocer un mensaje de reconocimiento enviado por el viceministro primero del Ministerio del Interior, vicealmirante Julio Cé­sar Gandarilla Bermejo.

De acuerdo con la explicación del mayor Jorge García Albero, jefe de la Unidad Técnica de prevención de incendios del Cuerpo de Bom­beros en Villa Clara, la provincia resultó seleccionada para este homenaje atendiendo a los resultados integrales y la profesionalidad alcanzada por esas fuerzas en el territorio, ade­más de la labor educativa desarrollada entre la población y los empresarios para erradicar las causas que propician esos siniestros.

Como parte de la conmemoración fueron entregadas condecoraciones a bomberos, oficiales y personalidades destacadas, así como monedas conmemorativas por el aniversario 320 del Cuerpo de Bomberos, el 125 del desastre de la ferretería Isasi en La Habana, y por el Aniversario 50 de la Semana Nacional de Pro­tección contra Incendios, además de la Dis­tinción Servicio Distinguido.

La ocasión fue propicia para la reinauguración del Comando de Caibarién, además de rendir tributo al Che y sus compañeros de lucha en la Plaza de la Revolución que se honra con su nombre en esta ciudad, donde también quedó plantado un árbol por el aniversario del primer cuerpo de bomberos en Cuba.