El balcón salió ileso

Las Tunas.—Los efectos de Matthew ape­nas rozaron al balcón del Oriente, que con escasas precipitaciones registradas retorna a la normalidad.

De acuerdo con datos ofrecidos por Raúl Oro, especialista en pronósticos del tiempo, los acumulados de lluvia han sido muy discretos en el territorio. Los más altos se registraron en las estaciones de Las Tunas y Puerto Padre, con 56 y 49 milímetros, respectivamente.

No obstante, la red de pluviómetros de Re­cursos Hidráulicos registró otras cifras entre los 106 y los 109 milímetros en las comunidades de San Manuel en Puerto Padre y Bartle, en el mu­nicipio cabecera.

Aunque las precipitaciones hubieran sido muy beneficiosas para los embalses tuneros, estos apenas tuvieron ligeras variaciones. De un 40 % de llenado que mostraban antes del paso del huracán, solo elevaron esa cifra un punto porcentual.

Se ha mantenido una vigilancia estrecha a las zonas bajas y áreas costeras, sobre todo al norte de la provincia. Sin embargo, hasta las siete de la noche de este miércoles no se ha­bían reportado inundaciones, olas de gran tamaño, ni penetraciones significativas del mar.

Una vez decretada la fase recuperativa, se inició la desmovilización de las personas evacuadas. Otras tareas también constituyen prioridad como son la vigilancia epidemiológica y la recogida de desechos sólidos. Ya se ha orientado la distribución de cerca de 500 quintales de productos agropecuarios para que la población pueda adquirirlos en mercados y placitas de la ciudad.

Desde el pasado lunes, cuatro brigadas de la empresa eléctrica de este territorio se encuentran prestando servicios en el municipio de Baracoa. A ellos se sumarán también trabajadores de Etecsa y todo el personal necesario para contribuir a la recuperación de las  localidades más afectadas.

Esta vez Las Tunas ha salido prácticamente ilesa; no obstante, se demostraron la efectividad del sistema de la Defensa Civil, y la disciplina y solidaridad de nuestro pueblo.