«Cuba condena todas las formas de terrorismo» afirmó Kenia Serrano Puig, presidenta del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP) a Granma Internacional al comentar las actividades que acontecen en los meses de septiembre y octubre como parte de la campaña Tenemos Memoria. Solidaridad contra el bloqueo y el terrorismo.
La también diputada cubana agregó que estas iniciativas nacieron de la experiencia acumulada por los movimientos solidarios con la Isla en los años de dura batalla por la libertad de Los Cinco héroes cubanos, (encarcelados durante más de una década por luchar contra los grupos terroristas asentados en el sur de la Florida) y que en estos momentos esas organizaciones de amistad apoyan a la Revolución en las aspiraciones de mantener la paz en el mundo.
«Estamos confirmando que continuamos la lucha y no vamos a desmovilizarnos. Nos mantendremos activos en función de solucionar muchas causas por la justicia y a favor de los oprimidos del mundo. En el centro de esa lucha está el ejemplo de Cuba, con una resistencia tenaz por su soberanía nacional en un proyecto social vivo, que se perfecciona con la participación cohesionada del pueblo en el proceso de actualización de nuestro modelo económico, para alcanzar más socialismo», aseguró Serrano Puig.
«Con esta jornada condenamos el genocida bloqueo económico, comercial y financiero aplicado por Estados Unidos desde 1962 contra la Mayor de las Antillas y los actos vandálicos y asesinatos patrocinados por la mafia cubana-americana para destruir a la Revolución», puntualizó la dirigente cubana, quien denunció las conspiraciones desestabilizadoras para derrocar los gobiernos constituciones en Venezuela, Bolivia y El Salvador.
A su vez se solidarizó con el pueblo de Brasil, víctima de un reciente golpe de Estado parlamentario ejecutado contra la presidenta Dilma Rousseff, maniobra aplicada con anterioridad contra Fernado Lugo en Paraguay y a Manuel Zelaya en Honduras.
«No vamos a olvidar y seguiremos peleando porque vamos a vencer», sentenció la entrevistada, quien señaló las diferentes fechas históricas a recordar en esta jornada, que finalizará el 27 de octubre con las votaciones en la Asamblea General de la ONU de la Resolución presentada por la cancillería cubana , que demanda la eliminación incondicional del bloqueo económico a Cuba.
Destacó que el inicio de las actividades lo marcó un acto de homenaje para recordar al joven italiano Fabio Di Celmo, quien fue asesinado por una bomba colocada por manos terroristas al servicio de la mafia anticubana de Miami el 4 de septiembre de 1997 en el hotel capitalino Copacabana. Se rememoró también el aniversario del golpe de Estado fascista en Chile del 11 de septiembre de 1973 y la muerte del presidente Salvador Allende.
Puntualizó que el 17 de septiembre se efectuó un panel de testimoniantes más un tuitazo a favor de la derogación de las políticas anexionistas y extraterritoriales impuestas a Cuba por la Casa Blanca, que hacen sufrir a los cubanos y han provocado afectaciones a la economía del país valorada en más de 753 688 millones de dólares en los últimos 50 años.
Los días 17 de cada mes se convocan a movilizaciones similares para dar cumplimiento a los acuerdos de la Cumbre de los Pueblos, celebrada en la Ciudad de Panamá en abril de 2015, en la cual se llegó al consenso de tomar la fecha para celebrar la victoria alcanzada por la solidaridad internacional en conseguir la libertad de Los Cinco patriotas cubanos.
Este panel denunció los crímenes y acciones extremistas organizadas desde EE.UU. que han dejado un saldo de más de 5000 cubanos muertos y un ejemplo fehaciente lo constituye Camilo Rojo, hijo de unos de los tripulantes de la aeronave de Cubana de Aviación, que estalló en pleno vuelo por una bomba puesta por elementos terroristas el 6 de octubre de 1976, y que costó la vida a sus 73 ocupantes.
Camilo Rojo, integrante del Comité de los familiares de las víctimas del terrorismo contra Cuba condenó los más de 300 actos de violencias ejecutados en su patria y planeados por la mafia anticubana radicada en el sur de La Florida y principalmente por los connotados asesinos Orlando Bosch y Luis Posada Carriles, quienes han vivido en total libertad en los Estados Unidos. «No son historia, sino hechos en espera de justicia», expresó y convocó a continuar las movilizaciones.
Por ese motivo, Fernando González, uno de Los Cinco, explicó el trabajo desarrollado por él y sus hermanos de causa: Gerardo Hernández, Ramón Labaniño, Antonio Guerrero y René González, durante la infiltración en las filas de organizaciones contrarrevolucionarias anticubanas en Miami.
Además reseñó la convivencia con su compañero de celda Oscar López Rivera, patriota boricua sentenciado a más de 60 años de prisión por luchar por la independencia para su país.
El acompañamiento de miles de grupos y activistas, movilizados por más de 16 años en la lucha por la libertad de Los Cinco e incondicionales con la Revolución, lo destacó la periodista cubana Arleen Rodríguez Derivet, quien puso el ejemplo del recientemente fallecido canadiense Jean Guy Allard, articulista de las páginas de Granma Internacional y un colaborador fiel en defensa de las causas asumidas por el pueblo de la mayor isla del Caribe.
La argentina Graciela Ramírez Cruz, representante del Comité Internacional Paz, Justicia y Dignidad con los Pueblos, expuso cómo el Plan Cóndor implementado por las dictaduras militares en la década de los años 70 del siglo XX ha resurgido, evidenciado en el Golpe de Estado parlamentario a los gobiernos de Dilma Rousseff en Brasil; Fernando Lugo en Paraguay y a Manuel Zelaya en Honduras. También en los planes violentos y agresivos contra el proceso bolivariano presidido por Nicolás Maduro en Venezuela y el gobierno de Evo Morales en Bolivia.
Esta actividad estuvo matizada por la participación de estudiantes universitarios, jóvenes y niños, integrantes de proyectos comunitarios, quienes enviaron sus mensajes a las redes sociales en Internet y unieron sus voces para condenar las sanciones económicas norteamericanas contra Cuba y proclamar un mundo de justicia y emancipación social.
SOLIDARIDAD CON UN HERMANO
Un tema central dentro de la jornada lo constituye un programa impulsado por una delegación de Puerto Rico, que desarrolla en la Mayor de las Antillas un intercambio con pobladores de las provincias Pinar del Río, La Habana, Matanzas y Santa Clara, proyecto en el cual se explica las razones de la justa causa por la independencia de la patria boricua, neocolonia aún de Estados Unidos.
Así lo hizo saber el profesor universitario puertorriqueño Julio A. Muriente Pérez, copresidente del Movimiento Independentista Nacional Hostosiano, quien aseguró que cada uno de los viajes a Cuba emprendidos por él o por cualquiera de sus compatriotas constituyó un franco desafío a las prohibiciones impuestas por el injustificado e inmoral bloqueo estadounidense.
«Nosotros asumimos la lucha contra el bloqueo, porque se nos ha querido vetar el derecho de relacionarnos con los cubanos. La historia entre cubanos y puertorriqueños es amplia, amorosa, íntima, yo diría que orgánica, indica la superación de las meras relaciones diplomáticas. Aquí hay amor entre dos pueblos».
«Un punto esencial dentro de la visita de la comitiva consiste en exigir la libertad para el líder independentista Oscar López Rivera. Pretendemos fortalecer la campaña en estos meses qen ue concluye el mandato el presidente Barack Obama para ver si de una vez y por todas libera a un preso político con más de 35 años en una cárcel. Ellos castigan a mi pueblo por ansiar la soberanía», afirmó Muriente Pérez-.
En ese tema expuso el fracaso del modelo económico impuesto a su país, hoy en una crisis total y con una deuda a pagar por más de 72 000 millones de dólares a empresas de Estados Unidos. Advirtió que el Estado Libre Asociado de Puerto Rico carece de soberanía y autoridad para solucionar ese problema, porque se fundamenta en industrias incapaces de generar riquezas. Todos los ingresos económicos creados en tierra Puertorriqueña son absorbidos por las trasnacionales norteamericanas.
Manifestó que la propuesta de Washington ha sido engendrar una cínica ley denominada Promesa, la cual justifica la presencia de una Junta de Control Fiscal integrada por siete personas no elegidas por el pueblo boricua con el propósito de legislar y conseguir la suma de dinero adeudada para pagar, haciendo recortes a los servicios públicos y generar más pobreza, explotación y dependencia.
Al respecto Elio Gámez, vicepresidente primero del ICAP señaló que esta nueva jornada de solidaridad con Puerto Rico es la consolidación de la voluntad del pueblo cubano y de su gobierno de apoyar a esa justa causa.
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