ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
Este año mi UBPC debe renovar cinco hectáreas, para lo cual preparamos las posturas, explica Abigaíl. Foto: Jorge Luis Merencio

BARACOA, Guantánamo.—Parece que, por fin, en este municipio comienza a rendírsele el merecido honor al cocotero (Cocos nucifera L.), la palmera más cultivada en el mun­do, con más de 100 usos reconocidos y larga tradición en esta zona, la cual atesora las mayores áreas del país.

Tal apreciación se sustenta en la diversidad de acciones emprendidas en los meses pasados para recuperar y desarrollar ese cultivo, cuya producción y acopios descendieron significativamente en los últimos años, en detrimento de la economía estatal y la de los productores.

Si en 1990 Baracoa produjo 27 600 toneladas de coco (600 000 quintales), en el 2015 apenas alcanzó 8 000 toneladas, lo que expresa la enorme caída, agravada por el hecho de que de esa última cantidad solo se compraron a los productores 1 400 toneladas, destinadas, ma­yormente a las industrias conserveras de Ba­racoa, Guantánamo y Santiago de Cuba.

Entre las causas principales de la merma en las cosechas se relacionan el bajo rendimiento por hectárea como consecuencia de la de-satención agrotécnica al cultivo, a la ausencia de fertilización y al azote del ácaro. El renglón agrícola también afrontó otras dificultades, como el desestímulo de los acopios por bajo precio de compra al productor y frecuentes impagos a campesinos y cooperativistas, por descapitalización de la empresa especializada.

A esos problemas se suman el desvío de la producción para alimentación animal y la elaboración y comercialización ilícita de aceite, ineficiencia de la industria extractora de grasa, por su obsolescencia tecnológica, e inestabilidad con los cuadros de dirección en la mencionada empresa, la que al mostrar repetidas pérdidas financieras, no honrar con sus activos las obligaciones contraídas y obtener resultados negativos en las audito-rías, fue sometida a proceso de liquidación (tal y como lo estipula el Lineamiento 17 de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución) y asimilada por la también extinguida Empresa de Café y Cacao, ahora denominada Agroforestal y Coco Baracoa.

LA CADENA PRODUCTIVA

Con esa categoría económica se identifica al programa destinado a la recuperación de ese cultivo en el montañoso municipio, a una mejor comercialización y al aprovechamiento industrial y manufacturado de las partes que conforman al árbol del cocotero y su codiciada fruta.

Acompañan a la nueva empresa baracoense en dicho proyecto entidades y organismos como el Ministerio de Economía y Pla­ni­ficación, el Grupo Agroforestal del Ministerio de la Agricultura, Producciones Varias del Ministerio del Interior y las empresas Ali­mentaria e Industrias Locales Varias. A la Universidad de Guantánamo le corresponde la preparación de los productores y de las personas que trabajarán en las inversiones para aportar valor agregado a los derivados del también llamado árbol de la vida.
Así las cosas, por ejemplo, a la unidad empresarial de base (UEB) Extractora de Aceite (perteneciente a la Empresa Agro­fo­restal y Coco Baracoa) le concierne, entre otras tareas, el acopio y beneficio del fruto, la venta de este y sus subproductos (caparazón, concha, madera y sustrato) a los diferentes usuarios y la obtención de la grasa, destinada a Suchel como principal cliente, quien la emplea en la elaboración de jabón.

Desde hace unos dos años la entidad baracoense no vende aceite a Suchel, por transformaciones tecnológicas de esa industria habanera, más los problemas con la calidad del producto, sobre todo su bajo refinamiento y elevada acidez.

La citada UEB también tiene como encomienda la sustitución de los hornos malayos por una tecnología más eficiente para el cocimiento de la copra (médula del coco), la cual favorecerá la calidad del aceite y al ambiente, al eliminar la emisión de gases contaminantes a la atmósfera, causada por el viejo proceder.

Jorge Luis Medina Sánchez y Alexánder Laffita Columbié, jefe de producción y especialista en desarrollo industrial en ese colectivo, respectivamente, refieren que para ejecutar esos y otros encargos está previsto un cambio tecnológico en la fábrica, el cual permitirá elaborar entre 2 000 y 2 500 toneladas de grasa anualmente, de 400-500 obtenidas en los últimos años. Por lo pronto, con el mantenimiento y alguna mejora, la planta tiene contratado entregar en el 2016 a Suchel 500 toneladas, todas en el segundo semestre.

A Industrias Locales Varias, por su parte, le pertenece ejecutar dos proyectos: uno destinado a la producción y comercialización de la fibra del coco y el sustrato orgánico, y el otro a la elaboración de artesanías y muebles a partir de la madera del árbol de los cien usos, aseguró Elvia Pérez Cisneros, analista de producción en ese colectivo, quien precisó que ambos propósitos demandan de un proceso inversionista para la construcción de las instalaciones y la adquisición de la tecnología.

Este colectivo, resaltamos, ya ha dado un paso adelante al iniciar la fabricación artesanal de losas para falso techo mediante el empleo de la fibra de coco y yeso, materias primas abundantes en la provincia.

Otro eslabón de la cadena, la Planta de Carbón Activado, patrimonio de la unidad empresarial de base (UEB) Producciones Varias Minint, se somete a reparación y mejora tecnológica, con el objetivo de incrementar la obtención de ese purificante, de amplio uso por los humanos. Según Pedro Correa Vargas, director en funciones de la UEB, progresan las condiciones físicas de la instalación, a la cual, además, se le remodeló la caldera, reparó y amplió la piscina de enfriamiento del carbón y se rehabilita el laboratorio, entre otras acciones.

Para sustentar las aspiraciones expuestas y el desarrollo integral del cocotero en Baracoa, el Ministerio de Economía y Planificación destinó 18 millones de dólares, de los cuales la mayor cuantía está incluida en el plan de la economía del presente año, explicó a Gran­ma Alexis Toirac, director de la Em­presa Agroforestal y Coco Baracoa.

OTRAS ACCIONES EN DESARROLLO

Argumentó el citado directivo que ya su empresa tiene contratada la tecnología para obtener en la industria un aceite de mayor calidad, más refinado, mediante un proceso de deshidratación de la copra, en sustitución de la tradicional quema de la nuez en los hornos malayos, causante de la elevada acidez del producto.

Hasta el momento el paso adelante más motivador, por todas las acciones favorables que desencadena, lo constituye el incremento del precio de compra del fruto al productor, que ahora es de 2 600 pesos con 60 centavos la tonelada de primera calidad (120 pesos el quintal), de 1 956,60 pesos el de segunda y de 3 261 el destinado a semilla. Hasta febrero último, en que comenzó a regir el nuevo valor, se pagaba el quintal a 60 pesos por una calidad única.

El aumento del precio ha sido acogido con beneplácito por los productores, quienes en respuesta acrecientan los acopios y comienzan a prestarle a las plantaciones la atención debida. Por otra parte, es interés de la empresa contratar todo el coco a los productores, objetivo en el cual se avanza, atestigua Ramón Capdesúñer Rosell, especialista principal de ese frutal.

La mejora en los acopios, junto a la reparación a la que fue sometida la industria extractora de aceite, posibilitó reanudar desde el pasado 14 de marzo la elaboración de ese surtido, interrumpida alrededor de un año por falta de mercado, y emprender el camino hacia el cumplimiento de la cifra comprometida con Suchel.

También —interviene nuevamente Alexis— está en marcha el mejoramiento tecnológico de las industrias conserveras de Baracoa y Guantánamo para procesar mayor volumen de la fruta y diversificar en lo posible los surtidos. A la vez se prueba en la masa porcina un pienso con aceite de coco entre sus componentes.

En fecha reciente representantes de la Empresa Agroindustrial Ceballos, de Ciego de Ávila, visitaron Baracoa con el objetivo de establecer contratos para la compra del renglón agrícola y su industrialización.

El programa de recuperación y fomento del cocotero contempla, asimismo, la construcción de un Centro de Reproducción de Entomófagos y Entomopatógenos (CREE) en la comunidad de Guamá, con el fin de combatir las plagas y enfermedades que afectan al cultivo, mayormente el ácaro, el cual, de acuerdo con especialistas y productores, daña alrededor del 40 % de la producción. La ejecución de esa instalación progresa y debe concluir en julio próximo.

Entre otras inversiones previstas para reanimar las cosechas está la adquisición este año de una brigada mecanizada para el arreglo de los caminos, lo que garantizará extraer el fruto de los sitios más recónditos e inaccesibles, donde hasta el momento se pierde o se destina a otros usos. La empresa también debe recibir en el 2016 camiones triples y tractores para el acopio y la comercialización del renglón exportable, informa el director.

EL NUEVO PRECIO ESTIMULA PRODUCIR

Lo mejor que nos ha pasado a los productores en muchos años, y también lo mejor para el cultivo, es el precio que ahora se nos paga por el fruto, asevera Abigaíl Dupotey Lambert, administrador de la unidad básica de producción cooperativa (UBPC) Mártires de Angola, radicada en Cane.

Creo que, por fin, por todo lo que se dice y se hace, ha llegado el momento del coco. En mi cooperativa lo esperábamos, por eso lo mantuvimos como cultivo fundamental, aunque por su bajo precio tuvimos que recurrir a otros renglones para proteger en lo posible la producción, la economía y el ingreso de los cooperativistas.

Estamos estimulados con el nuevo precio. Ahora sí vale la pena dedicarse al coco, reseña el reconocido labriego y agrega que este año, por primera vez en más de 20, podrán fertilizar algunas plantaciones. “En el 2016 mi UBPC aspira beneficiar las primeras 26 hectáreas, para lo cual ya contamos con parte del abono”.

Esta cooperativa ya vendió 38,4 toneladas del fruto y planifica concluir el año con no menos de 184 toneladas y 12 560 unidades para semilla.

Rafael Garrido Diez, uno de los productores destacados, rememora que hubo un mo­mento en que fue mejor dejar perder el coco que venderlo a la empresa, pues los campesinos prácticamente pagaban más por la cosecha (tumba, recolección, pelado, traslado a los puntos de acopio o a los hornos ma­layos), que lo que ingresaban por ella. “En­tonces el quintal se nos pagaba a 33 o 36 pesos, no recuerdo con precisión”, relata.

Ahora el precio sí nos beneficia y nos anima a producir, opina este socio de la cooperativa de crédito y servicios Bienvenido Brefe, en Paso del Toa.

Para no pocos baracoenses la asimilación del coco por la antigua Empresa de Café y Cacao (hoy Empresa Agroforestal y Coco Baracoa) le generaría no pocas dificultades, a partir de los diversos problemas afrontados por ese cultivo. Sin embargo, de trabajarse bien, tal acogida deberá constituir una fortaleza para el colectivo, por el avance tecnológico que le aportará, por la adquisición de nuevo equipamiento y, consecuentemente, por el incremento de las cosechas y los ingresos, favorecido todo por el encadenamiento productivo.

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okf dijo:

1

6 de mayo de 2016

00:33:18


Es digno reconocerr también en este empeño de recuperación cocotera, la contribución del CITMA en la provincia, en particular del Centro de Desarrollo de la Montaña que viene ejecutando en ese macizo importantes acciones de innovación tecnlógica y social.

Humberto dijo:

2

6 de mayo de 2016

08:47:17


Hay que ver el jugo natural enlatado en Indonesia y Viet Nam lo sabroso que es. Otras regiones de Cuba pudieras dedicar sus tierras a estos cultivos.

Romelkis Lores Llacer dijo:

3

6 de mayo de 2016

09:32:05


Q bueno leer estas palabras de los dirección de la empresa, me da gusto saber q mi tierra de nacimiento sigue progresando un saludo cariñoso.

Pepecito dijo:

4

6 de mayo de 2016

11:24:25


El árbol de los 100 usos y todavía no llegamos a 10 los usos que le damos en este país, bebemos dejar de ser productores de materias primas y convertirnos en productores de productos terminados para la comercialización y generar fuentes de empleo en esta región que tanta falta hace, se necesita el Complejo agroindustrial del coco que tendría más producciones asociadas que la propia caña de azúcar.

Jglez dijo:

5

6 de mayo de 2016

14:32:38


Saludos una noticia k da deceos de seguir leyendo para ver si otras cosas marchan y se proyectan así ., es k uno se cansa y hasta te aburren de escuchar o leer cocas k cuando pasan algún tiempo te das cuenta de las fartas de respeto . Hoy veo esta noticia con muchas perspectivas y se debe en primer lugar a k se le paga al campesino por su esfuerzo y se deja atrás lo mal pensado k están ganando mucho esto k ciempre ha cido incierto , los k trabajan duro en los campos tirnen k ganar mucho de lo contrario nunca habrá producción en el país de nada. Hay algo muy importante k hay k pensar y generalizar en todas las provincias ., no se puede olvidar k s los turistas del mundo les gusta mucho el agua de coco , el dulce de coco y el turismo se incrementará como nadie es capas de pensar., hay k garantizar el coco para todos los turistas y para todo el pueblo. Muchas gracias es mi opinión por lo k he visto en muchos paices.

Roberto dijo:

6

11 de mayo de 2016

15:04:46


Este país es un desastre económico. El comunismo NO sirve, cuándo es q' Granma reconocerá este hecho. O mejor dicho, cuándo, ustedes, los comunistas dejaran a Cuba en paz?