
Fue en Cuba en 1492, cuando la expedición española comandada por Cristóbal Colón vio por primera vez el tabaco en el llamado Nuevo Mundo. Según los historiadores en el tema los Indios Taínos (aborígenes cubanos) enrollaban y prendían unas hojas misteriosas que llamaban “Cohiba”, en una ceremonia desconocida hasta ese momento para los descubridores.
Desde ese punto de partida en Cuba hace más de 500 años, el tabaco fue comerciado y también plantado por todo el planeta. Sin embargo desde los inicios de ese descubrimiento, el tabaco negro cubano fue considerado el mejor del planeta por las condiciones únicas que ostentan ciertas partes de la Isla para su cultivo, distinción que conservan sin discusión más de 5 siglos después.
La esencia de esta diferencia está en el tabaco y su sabor, a partir de la unión de cuatro factores sólo existentes en esta Isla: suelos, clima, la variedad de Tabaco Negro Cubano, y el saber hacer de los vegueros y torcedores.
Es por ello que, en otros lugares se pueden haber adquirido ciertas habilidades e incluso las semillas cubanas, pero nunca la naturaleza del suelo y del clima de la Mayor de las Antillas. Este don que nadie encontrará en ningún otro lugar.
Tampoco hallará algo que iguale al conocimiento y cultura del tabaco acumulados durante siglos por el país.
Es un extraordinario trabajo el que realizan los agricultores con este cultivo. Años de sabiduría y paciente espera han de transcurrir hasta que se considera que la hoja está lista para confeccionar un cotizado puro Habano.
Sobre la actual campaña de frio de siembra del tabaco y otros aspectos de esta industria, de particular importancia para la economía y la identidad de la nación, Granma Internacional entrevista a Miguel Vladimir Rodríguez González, vicepresidente primero del Grupo Empresarial de Tabaco Tabacuba y profundo conocedor del tema.
Desde el pasado año y en lo que va de 2016, la Isla ha experimentado un comportamiento irregular del clima, debido a sequías, lluvias intensas, calor sofocante y frío a destiempo, que marcan la presencia en esta latitud del fenómeno climático conocido como El Niño-Oscilación Sur" (ENOS), un verdadero dolor de cabeza para la agricultura de la Isla.
--¿Cómo se desarrolla la campaña de frío de siembra de tabaco 2015-2016? ¿Han tenido impacto las irregularidades climáticas?
--La campaña comenzó bien, a pesar de que el tiempo y los cambios climáticos nos quieren jugar una mala pasada, no solo al tabaco, sino a todos los cultivos. La siembra comenzó el pasado 10 de octubre y hasta la fecha hemos podido sembrar las hectáreas que estaban previstas. Han sido contratadas y sembradas más de 25 000 hectáreas en todo el país.
“Primero comenzamos con mucha sequía y ahora con mucha lluvia, pero tenemos que aprender a convivir con estos cambios. No nos queda otra alternativa y nuestra base productiva lo ha asumido de esta manera con mucha abnegación.
“Hemos incrementado la capacitación de la base productiva y el fortalecimiento de las estructuras que atienden el riego, adquiriendo e instalando más sistemas de riego y que a su vez sean más eficientes; reubicando áreas de siembra hacia zonas menos secas, la construcción y mantenimiento de fuentes de abasto de agua, canales de riego, pozos y todo lo que podamos hacer para atenuar estos efectos negativos”.
--¿Aseguramiento material de la campaña?
--Todos los productos fitosanitarios y fertilizantes han sido asignados oportunamente para el desarrollo de una buena campaña de siembra. Igualmente han sido destinados muchos recursos para el aseguramiento de partes y piezas de la maquinaria agrícola de las bases productivas, así que, excepto el tiempo, consideramos que están creadas todas las condiciones para una buena campaña tabacalera.
--¿Se siembra tabaco en todo el país? ¿Cuál es el mejor territorio en la actual campaña y el mayor productor de esta planta de la familia de las solanáceas, oriunda de Sudamérica, la cual después se extendió por las Antillas y otras regiones del continente antes del Descubrimiento?
--Hoy sembramos tabaco en todas las provincias de la Isla, excepto en la capital y, por supuesto, la de mayor área y producciones continúa siendo Pinar del Río, con más de 16 000 hectáreas; que aporta casi el 70 % de la producción tabacalera de la nación.
“Es muy difícil hacer esta evaluación de que territorio lo está haciendo mejor, pues todo nuestro sistema empresarial y las bases productivas de todo el país han ido adquiriendo experiencia en el desarrollo del cultivo del tabaco. Estamos obteniendo muy buenos resultados en regiones donde hasta hace algunos años no había ninguna o muy poca experiencia. No voy a mencionar nombres para no herir susceptibilidades”.
--¿Qué importancia tiene la aplicación de la ciencia y la técnica en este sector?
--Yo creo que no hay ninguna actividad hoy en el mundo que pueda subsistir y desarrollarse sin la aplicación de los resultados de la investigación y la introducción de las nuevas tecnologías.
“El grupo dispone de un Instituto de Investigaciones, ubicado en San Antonio de los Baños, provincia de Artemisa, de mucha experiencia, creado en 1964, y con estaciones experimentales en Pinar del Rio, establecida en 1937, y otras dos en el centro del país: una de ellas, la de Cabaiguán, inaugurada en 1940,y la otra en Manicaragua, provincia de Villa Clara; así como un Grupo de Difusión Tecnológica en la provincia de Granma, puesto en funcionamiento en el 2003, para dar asistencia técnica a la región oriental del país, donde también se ha desarrollado la producción tabacalera en los últimos años con muy buenos resultados.
“Como ves, atesoramos mucha experiencia en la investigación científica vinculada al desarrollo de la industria tabacalera cubana, desde la agricultura hasta la industria.
“El objetivo principal de este instituto y de todos sus centros asociados es poner la ciencia y la innovación tecnológica en función del desarrollo tabacalero cubano. Una de sus principales actividades está relacionada con la introducción de nuevas variedades de tabaco resistentes a enfermedades o con mayores rendimientos y el enfrentamiento a plagas y enfermedades, que afectan al cultivo en Cuba y en todo el mundo”.
--¿Qué es Tabacuba?
--El Grupo Empresarial de Tabaco de Cuba, Tabacuba, fue creado en julio del año 2000, subordinado al Ministerio de la Agricultura, como la organización económica única del país que dirige integralmente la actividad tabacalera en todas las fases de su cadena productiva, desde la agricultura hasta la comercialización en el mercado internacional y en el ámbito cubano.
“Su misión actual es incrementar sostenidamente la contribución del sector tabacalero al balance de la economía nacional con la participación en el mercado mundial del tabaco y sus productos, manteniendo el liderazgo del Habano, mediante un desempeño eficiente, competitivo y sostenible.
“El sistema empresarial del Grupo está integrado por 45 empresas, de ellas 15 agrícolas, 6 agroindustriales, 9 de tabaco torcido (tabaco hecho a mano o Premium),4 de cigarrillos y 6 de servicios y comercialización.
Además, Tabacuba cuenta con 3 empresas mixtas, una sociedad mercantil y un Instituto de Investigaciones con 3 estaciones.
“En total el Grupo dirige 96 fábricas de tabaco torcido a mano (incluye las 9 fábricas de tabaco torcido de arriba), 46 de ellas dedicadas exclusivamente a tabaco de exportación; una fábrica de tabaco hecho a máquina con destino a la exportación y al mercado doméstico; una fábrica de cigarrillos de exportación y para el mercado interno y 4 para el consumo exclusivamente nacional.
“Igualmente disponemos de más de 250 escogidas, más de 40 centros de beneficio del tabaco y más de 60 despalillos (centros en los cuales se les quita la mitad de la vena central a las hojas de tabaco reservadas para tripa y un cuarto a las destinadas a capote, mientras que a las elegidas para capa se les quita completa, conformando dos bandas); en fin, que es un Grupo muy amplio, diverso y complejo por las múltiples actividades que se realizan en la producción tabacalera.
“En la parte puramente agrícola participan más de 600 formas productivas, de ellas unas 20 empresas estatales y el resto en formas de propiedad cooperativa o privada, en las que están integradas en cada campaña alrededor de 200 000 personas.
“En estos momentos el grupo se está perfeccionando y convirtiendo en una Organización Superior de Dirección, con mayores facultades en el sector empresarial, como parte de la implementación de la política del Partido Comunista de Cuba, aprobada en su VI Congreso, lo que nos pondrá en mejores condiciones para el desarrollo de la industria tabacalera cubana a tono con los nuevos tiempos”.
--¿Cuáles son los principales resultados y perspectivas de la industria?
--Nuestra industria produce hoy casi 300 millones de tabacos torcidos a mano, de ellos cerca de 100 millones con destino a la exportación y el resto para el consumo nacional. Producimos, además, unos 130 millones de tabacos hechos a máquina, casi el 90% de ellos con destino a la exportación y unos 15 mil millones de cigarrillos.
“La industria tabacalera cubana tiene muchas posibilidades de expansión y puedo destacar el proyecto que se ejecuta en la Zona Especial de Desarrollo de Mariel para la construcción de una nueva fábrica de cigarrillos con nuestro socio comercial Souza Cruz, de Brasil, que comenzará sus operaciones y puesta en marcha en el año 2018 con una capacidad anual de fabricación de unos 8 000 millones de unidades.
“La fábrica de cigarrillos de Holguín, la más moderna del país, tiene también un ambicioso proceso inversionista para ampliar y modernizar sus producciones. Este es un reto para el Grupo, pues pretendemos homologar los estándares de calidad y presentación del producto con destino al consumo nacional a los existentes hoy en todo el mundo.
“Igualmente está en fase de aprobación un programa de ampliación y modernización de la única fábrica de producción mecanizada de tabacos, negocio que desde hace 15 años tuvimos primero con la empresa española Altadis y luego con el socio inglés Imperial Tobacco Group”.
--En su opinión, ¿Qué representa el tabaco para nuestro país?
--El tabaco forma parte de la cultura e identidad nacionales. Dicen los historiadores que cuando los colonizadores españoles arribaron a nuestra tierra, ya los habitantes nativos disfrutaban del placer de fumar un buen tabaco, asociado a sus ritos y ceremonias religiosas.
--Luego, con la colonización, los españoles llevaron el tabaco a Europa y ahí comenzó la historia de su universalización que llega hasta nuestros días. Mucho ha sucedido desde entonces pero no cabe duda que el tabaco cubano sigue siendo reconocido por los más exigentes fumadores como el mejor tabaco del mundo.
Creo que más de 500 años de historia pesan mucho en la cultura de un pueblo y el tabaco cubano sigue siendo uno de los productos más emblemáticos de cara al mercado internacional, así que seguiremos apostando por el desarrollo de la industria tabacalera cubana y enfrentando todos los retos que se nos vienen encima con todas las aperturas de nuevos mercados de los que hemos estado ausentes durante muchos años y no por nuestra culpa. A buen entendedor con estas pocas palabras creo que son suficientes, no?
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javier dijo:
1
29 de febrero de 2016
09:31:06
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