CAMAGÜEY.—Las entidades que obtuvieron saldos favorables durante la X Comprobación Nacional al Control Interno, efectuada a finales del año pasado, demostraron cuánto se puede avanzar en la gestión económica cuando existe un ambiente de orden, disciplina, responsabilidad, transparencia, honestidad, exigencia y respeto a la legalidad.
Así lo apreció Gladys Bejerano Portela, vicepresidenta del Consejo de Estado y contralora general de la República, al cerrar en esta provincia el ciclo de análisis de los resultados del ejercicio de control en todo el país, que solo en Camagüey involucró a 138 auditores, con el apoyo de expertos de otros organismos y de estudiantes de las Ciencias Económicas.
Esta vez el riguroso proceso verificador se centró en el cumplimiento, a instancia local, de importantes políticas económicas y sociales aprobadas por el Estado cubano, como el curso que han tenido la descentralización de facultades a las empresas estatales, las medidas para enfrentar el creciente envejecimiento poblacional y el otorgamiento de subsidios para la construcción de viviendas.
Mediante inspecciones, auditorías y comprobaciones especiales, los auditores y supervisores concluyeron que, no obstante los modestos avances que se observan, todavía se dan casos de entidades que no logran pasar la exigente prueba al prevalecer, entre otras anomalías, evidentes muestras de descontrol, negligencia y violaciones de los registros contables.
Aunque en las entidades visitadas en seis de los 13 municipios camagüeyanos no se detectaron presuntos hechos delictivos o de corrupción administrativa, sí se registraron afectaciones económicas de consideración, consecuencia de una insuficiente labor fiscalizadora y de la inobservancia de las normas contables y financieras establecidas.
La Contralora General de la República llamó victorias pírricas cuando se logra someter a los infractores a los órganos de justicia, pues el propósito primero del sistema de control interno es prevenir, alertar oportunamente, actuar de manera resuelta sobre las causas y condiciones que facilitan la comisión de delitos, y sacar de cada caso las lecciones educativas y constructivas que correspondan.
Se trata, comentó, de tener siempre activado el termómetro de la prevención en un ejercicio constante, no una vez al año, a través del análisis sereno, justo, pero firme y sin blandenguería, de los problemas, para extirparlos de raíz y atajar a tiempo las fisuras en los controles que son aprovechadas por oportunistas y ladrones para delinquir y corromper.
En ese sentido, Bejerano Portela llamó a fortalecer el liderazgo, la integralidad, la profesionalidad y el ejemplo de los cuadros administrativos, quienes al acceder a los cargos de dirección en las empresas y organismos contraen un compromiso de lealtad y de servicio a la sociedad, sobre la base de la más estricta observancia de los valores éticos.
COMENTAR
Isael Quesada dijo:
1
22 de enero de 2016
09:41:54
Roberto dijo:
2
22 de enero de 2016
10:47:11
Responder comentario