Recinto ferial de aniversario

El 4 de enero de 1989 se fundó —por nues­tro Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz— Expocuba, la Ex­posición permanente de los resultados económicos y so­ciales de nuestro país, en homenaje al aniversario 30 de la Re­volución Cu­ba­na.

En menos de 22 meses se elaboró la concepción general, los proyectos, el plan general de construcción y montaje y se ejecutaron los múltiples objetos de obra, las in­fraestructuras, los mobiliarios, las plataformas para las muestras y los sistemas expositivos de lo que sería para orgullo de todo nuestro pueblo, el mayor recinto ferial del país.

El Comandante en Jefe tuvo la iniciativa e impulsó personalmente las obras para hacer posible este centro, cuya importancia mayor, según expresó “es el interés que le han da­do, como habíamos supuesto no­sotros, el interés que se han tomado todos los organismos del país, có­mo han trabajado, y cómo se convierte Expocuba en un centro de emu­lación, en un centro donde to­do el mundo tiene que exponer, lo que eso va a significar para la calidad nadie puede calcularlo, lo que eso va a significar para la colaboración. La misma Expocuba es un milagro de colaboración, de­ce­nas y decenas de em­presas han colaborado y por eso ha sido posible. No se sabe los bene­ficios que el país va a sa­car de Expocuba. De lo que estoy se­guro es que un día se sentirán orgullosos los habaneros de te­ner un centro, y el país entero de te­ner un centro de exposición co­mo ese”.

En los 27 años transcurridos —en los cuales han recibido a más de 15 millones 500 000 visitantes—, se ha desarrollado y consolidado como el recinto ferial por excelencia, centro de recreación, cultura y servicios pa­ra la población y de eventos na­cio­nales y extranjeros.

Desde 1989 también se cumple otro objetivo trazado por Fidel, ser la sede permanente de la Feria In­ter­na­cional de La Habana, que ha ido creciendo constantemente durante más de un cuarto de siglo.

Cumplir con esas orientaciones de Fidel, ha constituido y constituirá siempre un objetivo y un com­pro­miso de ese colectivo, y también de los Organismos de la Ad­mi­nis­tración Central del Estado, las or­ganizaciones superiores de dirección empresarial y las provincias que ocu­pan espacios en sus pabellones.