
ISLA DE LA JUVENTUD.— A tres años y unos meses de aprobarse por la dirección del país e iniciar en la Isla de la Juventud el programa de desarrollo integral, miles de personas disfrutan del impacto de las inversiones que se acometen por etapas, pues están planificadas hasta el 2020, y en el caso de la reanimación de la producción ganadera, el tabaco y la miel, sus resultados se alargarán en el tiempo.
Se destacan la ejecución de más de 176 millones 300 000 pesos en inversiones, y la terminación de 903 viviendas y de tres comunidades agrícolas. Hoy en fase final está la Roberto Orestes Moreno, donde unas 80 familias vivirán en confortables y seguros hogares, al tiempo que fomentarán el cítrico.
El municipio especial se favoreció con la adquisición de tractores, cosechadoras, retro, buldócer, el molino y el laboratorio de granos, para crecer en el arroz. También avanza la recuperación de vaquerías y la instalación de 17 termos refrigerados para la leche.
Los pineros cuentan con naves porcinas reparadas, una de pavo, el montaje de una moderna estación de bombeo en una comunidad agrícola, sistemas de riego para productores y un trasvase para llevar el agua hasta la zona arrocera en el poblado Julio Antonio Mella, además de un atractivo bulevard.
En el sector hidráulico se sustituyen las redes del sistema del acueducto de Nueva Gerona, del primer sector hidrométrico, donde se trabaja ya; en él unas 10 000 personas reciben ahora el agua de forma estable cuando llevaban hasta dos décadas sin el líquido. Igualmente se trabaja en el mantenimiento de las estaciones de bombeo y lagunas de oxidación, se garantizó una planta potabilizadora para Cayo Largo del Sur y se aplican las medidas de ahorro.
En el Hospital General Docente, en la recta final de la reparación capital, se logra una instalación segura y equipos modernos para el diagnóstico y tratamiento de los pacientes; solo restan pocos objetos de obra como neonatología y prepartos. Las acciones constructivas se realizan sin afectar los servicios, ya que es el único centro de su tipo en esa ínsula.
El programa de desarrollo integral en el territorio pinero favoreció la creación de 2 738 nuevos empleos y se incorporaron a la producción 3 379 hectáreas para producir alimentos que antes eran ocupadas por el marabú.
Desde el 2012, cuando se dieron los primeros pasos de este gigante programa que valida la voluntad política del Estado de beneficiar a los pobladores de la Isla de la Juventud, se crece en renglones como hortalizas, frijol, maíz, frutales, leche vacuna a la industria, carne vacuna y porcina, huevos, miel, café y tomate para la industria.
Es cierto que los resultados no satisfacen aún las demandas del pueblo, pero existen potencialidades para mayor organización en la producción y comercialización de los recursos, más en esta ínsula que incluyó en el programa de desarrollo integral el experimento de la venta liberada sin subsidios de insumos al sector agrícola estatal y cooperativista, que aporta más de 64 millones de pesos, ante la gama de renglones que se ofertan en tiendas con ese fin.
Avanzar más dependerá del esfuerzo y el aprovechamiento óptimo de cada materia prima que llegue o se produzca en este pedazo cubano en medio del mar Caribe.



















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Angel.L.Torres Hernández dijo:
1
4 de noviembre de 2015
11:48:02
yk dijo:
2
4 de noviembre de 2015
12:42:07
Jose ricardo Abad Gomero dijo:
3
4 de noviembre de 2015
15:26:00
Nor1 dijo:
4
5 de noviembre de 2015
11:37:20
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