Ofrendas florales enviadas por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, el General de Ejército Raúl Castro Ruz, y el Consejo de Estado, fueron colocadas por trabajadores portuarios y familiares de las víctimas del sabotaje al vapor francés La Coubre, a la entrada del histórico muelle, que hace 55 años fue testigo de uno de los sabotajes más mortíferos perpetrados contra la Revolución cubana.
Alberto Solís Sotolongo recordó con voz entrecortada cómo un policía salvó su vida luego de escuchar la primera detonación. “Mi papá era trabajador en ese muelle y vivíamos a poca distancia. Cuando sentí la explosión corrí en su búsqueda. Un oficial me detuvo. En lo que trataba de convencerlo para que me dejara pasar vino la segunda detonación.
Mi padre fue una de las víctimas. Estoy convencido que esa segunda descarga fue concebida para eliminar físicamente a los máximos líderes de nuestro país”, señaló.
Al hacer uso de la palabra en el acto, Ulises Guilarte de Nacimiento, miembro del Comité Central y secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba, dijo que “toda la investigación minuciosa de aquel estremecedor hecho, reveló desde el primer momento que la explosión no se había producido por un accidente, todo lo contrario. Se trataba de un hecho intencional, cuyas evidencias señalaban a la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos, vinculadas con este acto terrorista”.
Ambas explosiones sacudieron la agitada vida habanera, cobrándose la vida de 101 personas, y dejando un saldo superior a los 200 heridos, pero esta acción criminal patentó la solidaridad de nuestro pueblo y líderes políticos que acudieron a socorrer a los heridos tras la primera detonación.
Mientras numerosos cuerpos se apagaban en el alba de las transformaciones político-sociales que se vivían en esa época, una frase se levantaba al siguiente día —5 de marzo de 1960 — por encima de viles patrañas. Lejos de amedrentarnos, el valor caló profundo en nuestros ideales; sobre todo tras aquella frase pronunciada por Fidel y que retumbó en toda Cuba: ¡Patria o Muerte!
A la ceremonia político-cultural de este miércoles asistieron Mercedes López Acea, miembro del Buró Político, vicepresidenta del Consejo de Estado y primera secretaria del Partido en La Habana; dirigentes del Partido y el Gobierno en la capital; representantes de la Unión de Jóvenes Comunistas; miembros de otras organizaciones políticas y de masas, así como protagonistas de aquellos sucesos.



















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Manuel dijo:
1
5 de marzo de 2015
08:59:43
carlos agustin gonzalez gonzalez dijo:
2
5 de marzo de 2015
10:00:36
ROBERTO FUENTES dijo:
3
5 de marzo de 2015
11:55:50
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