
Cárdenas, Matanzas.—Desde hace varias semanas más de 15 000 cardenenses reciben ya de forma estable los beneficios del suministro de agua gracias al nuevo acueducto que se levanta en esa región matancera, ciudad con un crecimiento poblacional vertiginoso en los últimos años.
Los favorecidos son los vecinos del Consejo Popular de Pueblo Nuevo Sur, barrio periférico donde de solo echar un vistazo se aprecia la satisfacción por ese proyecto de gran impacto social.
“Esto es una divinidad, un anhelo acariciado por mucho tiempo”, comenta Lucía Gaitán, vecina de la localidad conocida como Llano Rojo. “Uno pierde hasta el juicio cuando falta el agua”, dice y nos conduce hasta la cocina para confirmar la presión del agua. “Miren qué chorro”, exclama sin quitar la mano de la pila.
Su esposo, por su parte, significa que en la casa disponen de un pozo del cual se sirven desde que residen allí, pero reconoce que la garantía del agua potable es incomparablemente mayor. “La gente está muy feliz. Todo el mundo no hace más que hablar de este asunto”, añadió.
Muy cerca de allí dialogamos con Daymara González, otra cardenense. “En un hogar sin los servicios del agua no hay tranquilidad, especialmente para las mujeres. El beneficio de esta obra es grande; imagínense, los pozos de aquí están contaminados”.
Javier Romero Perera, especialista de Recursos Hidráulicos, recuerda que es Cárdenas uno de los territorios donde resulta más crítica la situación con el abasto de agua, y que por ello el objetivo esencial del nuevo acueducto es mejorar el suministro y distribución del vital líquido, su calidad y uso racional.
Dijo que trabajadores de la Empresa de Mantenimiento y Reparación de Obras Hidráulicas del Centro ya materializaron 21,7 kilómetros de redes, 5,7 kilómetros de conductoras y 1,2 kilómetros de tuberías de distribución. Precisó que como parte de esta primera fase de la inversión, los trabajos se iniciarán próximamente hacia una de las zonas más bajas, el barrio conocido como Fundición, zona fundacional de la ciudad con fuentes precarias y tuberías de principios del siglo pasado.
La obra, que por su envergadura y complejidad involucra a varios organismos, resulta de sumo interés para las autoridades del municipio, las cuales chequean su marcha de forma asidua para recalcar su importancia y facilitar su cauce.
Eduardo Pérez Díaz, vicepresidente del Consejo de la Administración Municipal, sostuvo que aunque existen algunas preocupaciones motivadas por salideros, poca agilidad para recubrir las zanjas y los altos precios de algunos accesorios para las acometidas en el interior de las viviendas, ha sido un cambio significativo en la vida de la gente.
El proyecto para la solución final del acueducto de Cárdenas, así como del sistema de alcantarillados y drenaje pluvial, a un costo superior a los 80 millones de pesos, se prevé concluir en un plazo de unos seis años y comprende una fuente de abasto capaz de garantizar 786 litros por segundo, una conductora que conecta a todos los pozos, un centro de distribución y dos tuberías maestras conectadas a la red de distribución que servicia a la ciudad desde dos puntos distintos.
Pese a los inconvenientes que ocasiona la obra, derivados principalmente de los canales para colocar las tuberías, los cardenenses experimentan un alborozo inusual por este beneficio que le otorgará mayor prosperidad a la ciudad.
Pruebas de esa admiración trascienden del intercambio espontáneo con vecinos del barrio Pueblo Nuevo Sur. “Ahora nos quejamos de algún que otro percance pero ya tenemos agua, algo tan ansiado por todos”, reconoció Rolando Cortina, de 61 años de edad. “Esto es como un milagro, de las mejores cosas que se ha hecho aquí por el bienestar y la salud del pueblo”.
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R.F.Castillo dijo:
1
24 de febrero de 2015
08:28:35
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