¿Cómo lograr la gestión de conocimientos vinculados a la solución de los problemas de la sociedad? ¿Qué vías de estímulo pueden incentivar la permanencia del claustro de profesores? ¿Cuál es la estrategia para evitar el fraude en todos los ámbitos universitarios? Claustro comprometido, profesional de excelencia, impacto económico y social, gestión de la Educación Superior, constituyen prismas críticos por los cuales se continúa mirando la enseñanza universitaria en Cuba.
Ese propósito de los profesionales del sector se comprobó en los debates del Seminario Nacional de Preparación para el cumplimiento de los objetivos de trabajo del Ministerio de Educación Superior (MES) para el 2015, en el cual participaron los rectores de los centros de enseñanza y de investigación, así como directivos vinculados con el desarrollo del proceso docente educativo.
En el encuentro se analizaron las causas del éxodo de profesores y la importancia de incentivar el estímulo que promueva la estabilidad del claustro. En ese sentido, Rodolfo Alarcón, ministro de Educación Superior, refirió que se debe tener en cuenta la creación de un ambiente favorable de trabajo: “Sentirse bien, reconocido, con posibilidades de participar, son elementos muy importantes en una organización, y ese clima de trabajo nosotros lo tenemos que lograr”.
Informó que el sector educacional está comprendido en la política salarial del país, y se han comenzado a dar pasos de avance. La decisión de contratar en sus mismos cargos a profesores jubilados, y pagarles la suma del salario y la pensión, es un ejemplo. Además, informó que en un futuro esa política salarial favorecerá la obtención de ingresos adicionales por resultados de impacto en la economía y la sociedad; así como la remuneración a profesores, investigadores y trabajadores que coadyuven en la disminución de las importaciones y el incremento de las exportaciones.
Alarcón Ortiz abordó aspectos referentes a la calidad directamente vinculada al cumplimiento de “determinados patrones” que reflejan una mejoría en ese indicador: defensas de maestrías, doctorados, carreras e instituciones acreditadas. “Llega el momento en que la gente ya se siente satisfecha con lo que han realizado y no están buscando la excelencia, y en la universidad hay que estar buscando constantemente la excelencia”, reclamó.
Además, instó a aprovechar la flexibilidad de los planes de estudio y adecuarlos a las características de cada institución. “La Educación Superior cubana tiene que ser diversa. Si seguimos abogando por una uniformidad que no existe estamos limitando el desarrollo”.
Reflexionó sobre los hechos de fraude que lesionaron el prestigio de la enseñanza, las maneras en que puede presentarse en diferentes procesos de la vida académica, y cómo se debe enfrentar en cada espacio: “Una universidad no puede bajo ningún concepto convivir con eso. Tenemos una pugna entre gente que quiere violentar lo establecido para obtener su propósito, y nosotros, que tenemos que modificar constantemente nuestra prevención para evitar que se dé”.
Comentó las disímiles dificultades materiales a las cuales se enfrenta la Educación Superior: en el transporte para la gestión, el deterioro de aulas y residencias estudiantiles, la obsolescencia del equipamiento de laboratorio, y la conectividad, aún notoriamente insuficiente.
En el encuentro, viceministros del ramo presentaron los objetivos de trabajo para el próximo año, en el cual se prevé —entre otros aspectos— incrementar la calidad de las prácticas laborales y docentes, lograr niveles superiores en el aseguramiento bibliográfico, elevar la participación estudiantil en las tareas de impacto social vinculadas al proceso extensionista, e incrementar los programas académicos e instituciones con categoría de acreditación superior.



















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George dijo:
1
25 de septiembre de 2014
10:19:35
rosbel dijo:
2
25 de septiembre de 2014
11:35:29
HBN dijo:
3
25 de septiembre de 2014
15:56:19
edel dijo:
4
25 de septiembre de 2014
18:23:06
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