Elevar el protagonismo del movimiento sindical

Con su labor en las tareas de implementación del Código de Trabajo, el movimiento sindical tiene hoy las vías, formas y métodos para elevar su protagonismo en la representación de los trabajadores, y junto a ello garantizar el cumplimiento de su otra gran misión que es organizarlos y movilizarlos en favor del au­mento de la productividad y la eficiencia eco­­nómica.

Así resumió Ulises Guilarte de Nacimiento, miembro del Comité Central y secretario general de la CTC, las prioridades del trabajo sindical en este segundo semestre, asociadas a los principales planteamientos surgidos durante los procesos asamblearios del XX Congreso de la organización: lograr un ejercicio eficaz de representación del sindicato y vincular este a la aplicación de las políticas laborales y salariales.

El también integrante del Consejo de Estado informó ayer a la prensa el estado de la instrumentación de la Ley 116, Código de Trabajo, su Reglamento —Decreto 326 del Consejo de Ministros—, y 21 disposiciones complementarias de varios ministerios, que se encuentran en vigor desde el pasado 18 de junio.

Tras señalar como objetivo clave la capacitación de los dirigentes sindicales a todos los niveles, dijo que ya culminó el ciclo de preparación de los cuadros profesionales —unos 4 200 de la estructura nacional hasta las provincias—, y ahora se avanza en la de los dirigentes de las secciones sindicales —no menos de 240 mil de más de 82 mil secciones sindicales—, proceso que deberá terminar en octubre.

Explicó que paralelo a la capacitación, se desarrolla la negociación a escala nacional para elaborar los lineamientos generales en los que se basarán los Convenios Colectivos de Trabajo de cada centro, lo cual se realiza entre los 17 sindicatos nacionales, los organismos de la Ad­ministración Central del Estado, y en esta oportunidad, en los ministerios reordenados, también con las Organizaciones Superiores de Dirección Empresarial (OSDE).

Comentó que entre otros asuntos que tienen que aparecer en los convenios (hay alrededor de 25 aspectos en la nueva codificación para ser contemplados) están: la organización de la jornada y horario laboral, requisitos de idoneidad demostrada para la evaluación del trabajador, determinación de los cargos por designación y los de alto riesgo, régimen de trabajo y descanso, días de pago, formas y sistemas de pago y condiciones de vida y de trabajo.

Esa capacidad negociadora es la que reflejará el poder de representación de los sindicatos ante sus afiliados, afirmó, aclarando que dichos lineamientos generales deberán quedar aprobados el 30 de este mes, para a partir de ellos dar paso a la elaboración de los Convenios Co­lectivos en los centros laborales, cuya aprobación, según lo establecido, será en Asamblea de Trabajadores hasta el 22 del venidero diciembre.

Otros componentes en la implementación del Código están relacionados con la confección de los reglamentos disciplinarios ramales (al modificarse las medidas disciplinarias reconocidas en el Código, que eran nueve y quedaron seis), que estará concluida para el 30 de octubre, de manera tal que puedan adecuarse los de carácter interno en cada colectivo, documento que, igualmente, será aprobado en Asamblea de Trabajadores, de conjunto con el Convenio Colectivo; así como la creación de los Órganos de Justicia Laboral y elección de sus 5 o 7 miembros, la mayoría de ellos trabajadores elegidos en asamblea, proceso este que debe terminar para el 31 de octubre.