Los queremos en casa Ya

En aras de ofrecer respuestas a interrogantes de los internautas de todo el mundo, sesionó ayer miércoles, a propósito del 26 de junio, día Internacional de las Naciones Unidas en Apoyo a las Víctimas de la Tortura, un Foro Online por la excarcelación de los héores cu­ba­nos, con sede en el Ministerio de Rela­cio­nes Exteriores.

Bajo el llamado de Los queremos en casa Ya, el Foro formuló su objetivo en pos de dar a conocer al mundo las torturas sicológicas e inhumanas a las que han estado sometidos los héroes cubanos y sus familiares, y a extender el llamado de su inmediata libertad.

Al respecto, Graciela Ramírez, coordinadora del Comité Internacional de Solidaridad con Los Cinco, reflexionó sobre la noción de tortura, y cómo, a lo largo de los 16 años de injusto arresto, se ha visto una forma de tortura sutil, perversa, inhumana, no solo en los prisioneros si no en sus familiares.

¿Qué es para un ser humano que además es inocente tener dos cadenas perpetuas, una condena a muerte en prisión? ¿Qué significa para ese ser humano (…) privarle del afecto de sus seres queridos? ¿Qué significa para un familiar ir a visitarlo, llegar, que la prisión esté cerrada, y regresar sin haber visto a ese ser querido? ¿Es o no tortura la prolongación de la injusticia en el tiempo? ¿Es normal, es lógico? (…), estas fueron algunas de las interrogantes sobre las que Ramírez centró sus argumentos.

Por su parte, Ailí Labañino, hija de Ramón, y otra de las panelistas del Foro, rememoró sobre la situación que ha vivido junto a su padre, al tiempo que incentivó a todos a transmitir la energía que Ramón desborda. “Más de la mitad de nuestras vidas hemos estado luchando por un familiar. Tenemos más experiencias en visitas a prisiones que experiencias en casa jugando con nuestro padre”, relató, al tiempo que demostró que su esperanza está en la actitud de Ramón.

El evento contó además con la intervención de Pablo Odén Marichal, coordinador de la Plataforma Interreligiosa Cubana, quien enfatizó en que las distintas denominaciones religiosas se han unido por la liberación de los héroes cubanos, por la paz de la vida, la comunidad y las naciones.