Nos hemos propuesto formar integralmente artistas profesionales de la música sobre la base de elevados valores estéticos y humanos, y plenamente identificados con los principios revolucionarios, capaces de preservar y enriquecer la cultura cubana, refirió a Granma Aimée Prieto Hechavarría, directora de la Escuela Nacional de Música, Centro de Referencia Nacional, con motivo de la gala de graduación de la generación estudiantil 2013-2014 de dicho centro, efectuada ayer miércoles en el teatro Miramar.
En el evento, la máster en Ciencias del Arte añadió que culminar los estudios de nivel medio profesional en el actual curso escolar ha sido una meta complicada, donde la prioridad se encaminó a enriquecer la formación artística de los protagonistas de este proceso de enseñanza: los estudiantes procedentes de diferentes provincias, quienes contribuirán a fortalecer nuestra cultura nacional. “Aún quedan nuevas metas para todos, pero el tesoro de la música tiene más para ofrecer, descubrir, y conquistar”, expresó la directora.
Por su parte, Paula Celia Llanes Suárez, Título de Oro, alumna más integral de este curso y recién graduada de violín, comentó que el mayor deseo de quienes comenzaron la enseñanza media de música es ir hasta el final con los mejores resultados posibles, y que al culminar una de las etapas más importantes de sus vidas, hoy se hace realidad el sueño de muchos: ser graduados de una de las escuelas más emblemáticas de la Isla, por cuyas aulas pasaron, en diferentes generaciones, muchas de las figuras representativas de la cultura musical de nuestro país.

“Estos cuatro años que ahora parecen uno solo, nos dejan ir con un enfoque diferente en disímiles aspectos, pues nos hemos superado y crecido como seres humanos y músicos.
“Aunque se extrañen los pasillos llenos (…) y la satisfacción del trabajo en conjunto, estoy muy segura de que la mayoría de nosotros comenzamos nuestra vida como profesionales con un profundo sentimiento de satisfacción por los logros obtenidos, metas alcanzadas y con nuevas expectativas, sabiendo ahora con más certeza qué es lo que queremos. Y eso lo debemos, en gran medida, al amor y dedicación con que nos ha preparado el claustro de profesores de la Escuela Nacional de Música”, sostuvo la estudiante.
La Escuela Nacional de Música contó este curso con 90 graduados en las diferentes especialidades, descollando con ocho Títulos de Oro, por orden de puntuación: Keilín García (guitarra), Gabriel Freeman (piano), Karla de la Caridad Hernández (trompa), Paula Cecilia Llanes (violín), Jonathan Santana (piano), Daniel Torres (teórico), Víctor Luis Guzmán (saxofón) y Lázaro A. González (trompeta).
El espacio, dominado por un ambiente musical, contó con las interpretaciones de la Banda y la Jazz Band de la Escuela, un Quinteto de Viento, Ensemble de Cuerdas Pulsadas, el Coro de Cámara, ejecuciones para solista y orquesta (violín y trompeta), Cuarteto de Trombones, Contemporáneo Ensemble, Septeto Somos tradición y otras ejecuciones de solistas (piano, flauta, trompa, arpa y guitarra).
Asistieron a la gala Julián González Toledo y Abel Acosta Damas, ministro y viceministro de Cultura, respectivamente; Orlando Vistel, presidente del Instituto Cubano de la Música y Mirtha Rodríguez, madre de Antonio Guerrero.



















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Nelson Wilian García Luís dijo:
1
12 de junio de 2014
12:32:42
Teymor David dijo:
2
12 de junio de 2014
14:16:04
armando hernandez dijo:
3
13 de junio de 2014
09:33:47
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