Pese a que en el periodo óptimo de la zafra varias provincias vieron alterado el abasto de caña a causa de la lluvia, la producción mantuvo su tendencia a la mejoría.
La materia prima en los campos daba para extraer mucho más azúcar y seguir la ruta emprendida, pero la humedad y la ausencia de frío impidieron alcanzar el rendimiento industrial que el país planificó.
Sobre Ciego de Ávila, Cienfuegos, Sancti Spíritus, Guantánamo y Santiago de Cuba, los cinco territorios cumplidores ??—Holguín está próximo— descansa el 3 % de incremento sobre la campaña anterior.
Los vaivenes en el suministro de caña tuvo en las precipitaciones —en muchos casos favoreció las nuevas siembras—, su peor enemigo; así lo refleja el 60 % de aprovechamiento de la norma potencial.
Al cierre de mayo eran 24 los ingenios cumplidores y otros 11 luchaban por sumarse al grupo; entre ellos el Carlos Manuel de Céspedes, de Camagüey, tenía la mayor posibilidad.
A su vez la nación totalizaba el 87 % del azúcar crudo contemplado en el plan y sigue en la batalla para aproximarse al 90 % mientras los costos lo justifiquen.
El sistema organizativo desplegado por Azcuba, las inversiones y trabajos especiales en centrales con alto tiempo perdido industrial, las medidas para fortalecer los equipos de dirección donde hiciera falta y asegurar una arrancada puntual, eran elementos de garantía en el aumento de la eficiencia.
Ya casi al cierre de la campaña se reconoce a los operarios, mecánicos y el personal de los medios que, en la cosecha pasada, ocasionaron cerca del 9 % de inactividad fabril y esta vez, en cambio, es inferior al 4 %.
Incluso parte de los 24 ingenios que completaron su azúcar padecieron, en algún grado, del clima adverso que le costó a la industria el 19,32 % del tiempo que perdió. Otros mantienen abiertas las capacidades y aprovechan días de oreo para incrementar sus toneladas de azúcar y preservar la calidad que la distinguen.
En este grupo hay colosos decisivos como el Antonio Guiteras, de Las Tunas, que dadas las características de su zona en Puerto Padre, sigue con los molinos abiertos para descontarle lo más posible al déficit actual.
Los azucareros tienen en este 2014 más cumplidores que el pasado año, pero se habían creado condiciones en los 49 centrales que trabajaron para un volumen superior.
La zafra necesita de cada entidad el azúcar programado, algo difícil si la molienda y el rendimiento industrial no cubren las expectativas.
Según los análisis el 15,74 % del tiempo perdido en la industria , similar al 2013, se localiza, en lo fundamental, en los incumplidores. Y es oportuno señalar que de algunos se esperaba mucho más en los parámetros de la eficiencia.



















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amado dijo:
1
29 de mayo de 2014
02:21:23
Enrique dijo:
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29 de mayo de 2014
10:23:47
albert dijo:
3
29 de mayo de 2014
16:25:33
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29 de mayo de 2014
17:54:36
otto dijo:
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29 de mayo de 2014
18:29:32
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