
ARTEMISA.— Experiencias como la de Yanset Cruz Hernández, quien ingresó a los 19 años a la Asociación Económica Internacional (AEI) Quality COI, y ha sido testigo desde ese momento de la envergadura de una obra como la emprendida en Mariel, demuestran que en el quehacer de los jóvenes también puede confiarse, sin importar la magnitud del trabajo a desarrollar, ni cuánto compromiso y responsabilidad implique.
Solo dos cursos de práctica docente en la fábrica de cemento de ese municipio avalaban el decursar de la joven por el otrora Instituto Politécnico América Latina, cuando se incorporó a la obra a finales de diciembre del 2010 para someterse a un periodo de prueba, luego de haber concluido su formación como técnico medio en Construcción Civil en el referido centro educacional.
Su entrega y sobre todo, la tenacidad desplegada, la hicieron adquirir en muy poco tiempo las habilidades necesarias en su desempeño como técnica en la especialidad estudiada, en la construcción de las losas prefabricadas para el muelle. "Durante ese tiempo supervisé el proceso constructivo de los laboratorios de calidad y las oficinas que se comenzaron a hacer en el área de prefabricado", dice.
Y para el mes de abril del 2011 asumió durante unos días la función de jefa de área, al salir de vacaciones el encargado general; su labor en tan breve periodo hizo que el gerente de producción le orientara una nueva tarea: "Ser la encargada general de todos los equipos de izaje (grúas, camiones grúas, entre otros). Esta fue la experiencia más grande, principalmente porque es-taba fuera de mi perfil, además de ser un trabajo que necesitaba mucha confianza y perseverancia", manifiesta.
Sin embargo, no imaginaba lo que vendría después, al dársele la oportunidad de "estar al frente del proceso constructivo del primer puente de tierra armada realizado en el país —conocido como el elevado de Mariel—, con la asesoría de un integrante de Faber Structor (una compañía extranjera de terraplenes armados) y un ingeniero ecuatoriano de la Compañía de Obras de In-fraestructura (COI).
Tras dos meses de intenso trabajo cumplió la misión y entonces se incorporó como jefa de colectivo en el sistema constructivo de las vigas RTG, que son los cimientos por don-de transitarían posteriormente las grúas RTG del patio de contenedores. "En la retroárea trabajé con mi equipo —uno de los 12 colectivos que laboraban simultáneamente en ese lugar— hasta la terminación y entrega de 700 metros de muelle y la culminación de la primera etapa del proyecto".
Al preguntarle sobre su experiencia durante ese tiempo al frente de más de 70 hombres, afirma que "siempre he tenido el criterio de que el respeto se gana, no se exige y quien quiera merecerlo solo debe brindarlo y aprender a que no te vean como la jefa, sino como un ser humano con la intención de enseñarles a ser cada día mejores personas y operarios".
Y de los más de tres años de intenso trabajo en la obra comenta: "Ha sido un desafío bastante grande pero a su vez formador, porque ha fortalecido mi experiencia profesional y ha aumentado mi amor hacia la construcción. Uno siente una satisfacción inmensa al ver un día un objeto que prácticamente no es nada y después mirar hacia adelante y ver esa obra realizada con el fruto del sacrificio, el trabajo y la dedicación".
Una vez de regreso del trabajo, jornadas de estudios ocupan el quehacer de esta joven marieleña de 22 años. "Mi principal reto es graduarme de ingeniera civil; me preparo actualmente para coger la carrera. Además, deseo continuar en la obra y tener el privilegio de ver concluida la segunda etapa del proyecto de la Zona de Desarrollo Especial Mariel".
Ahora le asignarán una nueva tarea en la Zona de Apoyo y Logística, y tendrá además la oportunidad de participar próximamente en el Congreso de la FMC, al ser invitada a la magna cita. "Representa un inmenso compromiso con mis compañeras de trabajo, las federadas de mi circunscripción y quienes me eligieron y concedieron la oportunidad de participar en una experiencia única, para así poder intercambiar criterios y una vez más ver el fruto del trabajo de la mujer cubana, que se ha convertido en baluarte de la Revolución y está integrada a la sociedad en diferentes frentes".
COMENTAR
Responder comentario