Yateras, Guantánamo.–«Imagínese, yo vivo allá arriba, mire», y señala un cerro que flanquea a Felicidad de Yateras por el oeste. Liz Alejandra Belón hace un breve silencio, pero sus ojos hablan de gratitud: «¿qué hubiera sido de mí si la pandemia coge a este lugar como dicen mis abuelos que estaba cuando ellos tenían mi edad: sin médicos ni electricidad, sin televisor ni teléfono?».
Con la mochila a la espalda y un libro en las manos, la pequeña de 11 años desgrana sus conjeturas: «si fuera como antes, quizá no tuviera maestro, ni escuela. Y de ver clases en la tele, ni hablar...». 
«Pero estos tiempos no son como aquellos –prosigue la niña–, aquí vimos las teleclases; tomé notas, y cuando explicaban muy rápido, las grababa y les hacía fotos con el celular. Así pude ayudar también a algunos amigos y amigas del aula, quienes me preguntaban por teléfono».
«A veces yo tenía dudas sobre algo; entonces llamaba a mi "seño", Erianne Caraballo, para que me explicara. Mis tareas integradoras ya están listas; hice la de historia sobre la vida de Haydée Santamaría. Ella conoció a Boris Luis Santa Coloma en la lucha, y con él compartió las ideas y el amor. Fue una relación muy bonita».
La plática se interrumpe a la entrada del centro escolar Eduardo René Chivas, «mi escuela desde que empecé en prescolar; ya estoy en el sexto grado», refiere Liz; «hoy vine a consultar un libro en la biblioteca».
En la René Chivas, el movimiento es constante; unos limpian las aulas o los pasillos, otros hacen lo mismo en las áreas verdes o reorganizan el mobiliario; «es lo que ocurre en las 46 escuelas del municipio» –de ellas 39 multigrado–, aclara Dailín Cantillo Neyra, jefa del nivel educativo primario en Yateras.
«Se acondicionan locales y se reajustan horarios para la conclusión del presente curso escolar con las medidas sanitarias y de distanciamiento indicadas», añade Cantillo Neyra.
Un empeño similar prevalece en las 778 instituciones educacionales guantanameras, incluidas cerca de 430 situadas en las montañas. A contrapelo del virus letal y del bloqueo, todas se llenarán de sonrisas, como en cada septiembre desde hace 60 años en Cuba. Para eso la Isla derrotó a la pandemia neocolonial.
 
                        
                        
                        
                    






 
            
COMENTAR
Jesus Franco dijo:
1
16 de julio de 2020
03:26:26
Responder comentario