El pasado 26 de julio me correspondió comprar la llamada balita de gas.
Mi hijo llegó, según el Jefe del Punto, a las dos y diez de la tarde; es decir, pasado diez minutos, y él le dijo que se le había pasado el turno.
Por lo tanto, perdía la balita, aunque el propio responsable le expresó que su balita estaba ahí; que si el almacenero se la entregaba, él se la vendía.
Qué norma legal existe que modifique el horario, que de forma general conocemos en todos los puntos, que se abre a las ocho de la mañana y se brinda servicio hasta las cuatro de la tarde, aunque en San Justo, en Guantánamo, no existe ninguno. Aquí es hasta las dos de la tarde.
Hasta ahora no he recibido respuesta, desde que fui a la oficina comercial de la empresa.
Edita Romero Galano, calle 7 Este, No. 608, e/ Paseo y el Uno Norte, San Justo, Guantánamo.
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