Siguen los daños porque el árbol no se tala

Mi vivienda sufre los daños ocasionados por un árbol de mango, que se encuentra en el patio contiguo de una peluquería arrendada, situada en Callejuela 5 Oeste, entre 12 y 13 Sur, en la ciudad de Guantánamo, y que pertenece a la Empresa Provincial de Gestión de Inmuebles de Guantánamo.

Las raíces han dañado una pared de mampostería, límite de mi propiedad, al mover el cimiento, y las ramas se encuentran sobre mi techo. Además, cuando hay frutos, los transeúntes tiran piedras y otros objetos para tumbar los mangos, y caen sobre las láminas de zinc del techo de mi patio de servicios.

También a ese árbol se trepan otras personas en horario laboral, y fisgonean al interior de mi propiedad.

En mi gestión para resolver este problema, acudí al Servicio Estatal Forestal (SEF), del Ministerio de la Agricultura. Fui atendido por su director, quien comprobó en una visita la situación que explico y, a su vez, dictaminó que debía ser talado el árbol.

Se despachó el tema con la gestora de la empresa, pero no ha habido respuesta objetiva, sino evasivas.

Alejandro Moreaux Jay, calle 13 Sur, No. 1168, e/ 5 y 6 Oeste, Guantánamo.