Tigres cazan en Bayamo

Siempre resulta difícil bailar en casa del trompo. Pero los Tigres avileños no se amilanaron por el hecho de estar jugando en el cuartel general del equipo más bateador de la 54 Serie Nacional y derrotaron a los Alazanes granmenses con una tremenda ofensiva que desbordó a la de sus adversarios. En el otro choque diurno los Piratas de la Isla mantuvieron su abrazo en el tercer puesto con Ciego al derrotar a los Cazadores artemiseños por siete carreras de diferencia.

Fue el del Mártires de Barbados un auténtico duelo a batazos pues se marcaron 28 carreras con 35 indiscutibles, de ellos seis dobletes y cuatro jonrones. Y, como es lógico, un desfile de lanzadores, diez en total, seis de ellos del lado de los anfitriones. Nadie pudo escapar, ni siquiera el ganador, el diestro del municipio de Bolivia, Yunier Cano, un prospecto de 20 años con una sola temporada de experiencia, quien se alzó con su décima victoria a pesar de tolerar seis jits y cuatro carreras inmaculadas en igual cantidad de entradas de labor.

Resultó una inspiración el torpedero Yorbis Borroto, un internacional que anda por su campaña número 13, quien disparó un par de cuadrangulares para fletar tres anotaciones. Ade­más de él, sobresalieron madero en ristre Yoelvis Fiss, de 6-3, tres anotadas, otras tantas remolcadas y un bambinazo; Humberto Morales, 5-4 y el receptor Osvaldo Vázquez, de 3-2 con tres impulsadas. Por los vencidos destacó el refuerzo tunero Yordanis Alarcón, 5-4, uno de ellos el jonrón con bases llenas número 30 de la justa y octavo a la cuenta de un bateador de Granma.

No se dan por vencidos los Piratas pineros, siempre jugando muy bien en su patio. Y no siempre se ve cómo un lanzador es sustituido luego de cuatro capítulos de labor sin que le conecten de jit. Ese resultó el caso de Navid Cosme, quien abandonó el montículo con dos carreras permitidas —una de ellas su­cia—, en buena medida por culpa de su descontrol, seis bases regaladas que, sumadas a otras cinco concedidas por los relevistas, su­maron 11 transferencias en total de los serpentineros artemiseños.

Con semejante lastre resulta muy complicado ganar. De demostrarlo se encargaron los discípulos del mentor José Luis Rodríguez Pantoja, quienes con solo ocho imparables fabricaron la misma cantidad de carreras. De todos ellos el más importante fue el triple del refuerzo cienfueguero Yusniel Ibáñez con tres compañeros en circulación, conexión virtualmente decisiva.

Otro “importado”, el zurdo tunero Darien Núñez, permitió una limpia en seis capítulos con dos ponches, para aumentar su total a 92, líder del casillero. Ahora avileños y pineros exhiben idéntico balance de 39 éxitos y 31 fracasos, abrazados en el tercer escalón de la tabla de posiciones.

COCODRILOS, OTRA VEZ SOLOS

Al parecer a los Cocodrilos yumurinos no les agradó compartir la cima con los Alazanes granmenses y, aprovechando el revés de estos últimos ante Ciego de Ávila, volvieron a quedarse solos en la cumbre con un triunfo ante los Cachorros holguineros, apoyados en el brazo de Jonder Martínez y la fuerza del receptor Andrés Reyna.

Jonder trabajó siete entradas aceptando una sola carrera limpia con cinco ponches y otra vez sin regalar transferencias. Reyna disparó cuadrangular con dos a bordo en el cuarto episodio para darle a los Cocodrilos una ventaja que nunca perdieron. Alexei Bell, de 4-3 con tres anotadas, y Yurisbel Gracial, 5-3 fueron otros destacados a la ofensiva.

En el Latino, los Industriales se soltaron a batear y no pararon hasta conseguir poner a los Vegueros pinareños fuera de combate. Siete carreras en los dos primeros capítulos a expensas de un Erlis Casanova sin su velocidad acostumbrada y otras siete más en los innings siete y ocho sellaron la suerte del encuentro.

Alexander Malleta, de 5-3 con cinco impulsadas, cuatro de ellas con cuadrangular, Yulieski Gurriel, de 5-3 con tres anotadas y Rudy Reyes, igualmente 5-3 con tres fletadas, fueron los líderes al ataque. Alberto Biset, a pesar de no estar en su mejor noche—afectado por problemas con su presión arterial—,se llevó su décima victoria trabajando cinco entradas.