
Su pregón desparrama agudeza, seguido por un silbato que taladra los tímpanos. Es el frondoso pecho operático del vendedor de pan ambulante, dotado de potencia para vocearte, a las siete de la mañana, ante la puerta de la casa: ¡El paaaaaan suavecito, vecina!
La llamada de atención oficia cual inesperado despertador para quienes trabajan por la madrugada y a esa hora ensartan el sueño. Es la repetida frase del hombre empujando su carrito, que a unos les calza el desayuno y a otros les despedaza el descanso.
No existen oídos sordos frente a esta avalancha de voceadores iniciada tiempo atrás como una tímida incursión matutina —hoy corregida y aumentada— repitiendo su recorrido cuadra por cuadra, para en la mañana, tarde y noche (siempre al compás del pitazo) anunciarnos su aparición, convoyada con una mantequilla que se derrite al minuto y desaparece tragada por el migajón.
Tal vez en un esfuerzo de tolerancia pudiera soportarse el tiroteo cruzado si únicamente ocuparan la pista aquellos que ofertan el pan nuestro de cada día, sin embargo, la gama de voceadores se ha diversificado hasta el infinito y más allá, para imprimirle un ritmo sonoro a la competencia. Quedaron atrás los momentos en que copaban las plazas el vendedor de flores o el amolador de tijeras, musicalizado con su sonsonete filarmónico para darte la oportunidad de afilar los instrumentos cortantes del hogar.
La variedad hace el gusto. Sin pretender establecer un orden en el desfile; después del silbatazo a pecho abierto del pan, pasa calle arriba y abajo el hombre de las mil ofertas en una mochila. Esta tienda sobre dos pies anuncia cualquier cantidad de productos que en su diversidad todos viajan colgados a su espalda: comino molido, goma loca, bijol, fósforos, bicarbonato, nitrazepán, etc. El caminante arrastra una desventaja en relación con sus competidores: como son tantas las mercancías propuestas en su andar, no tiene oportunidad de soplar un silbato.
Tras “disfrutar” el concierto de voces mañaneras, acaricias la ilusión de engarzar un chispazo de sueño al mediodía, en un escape hacia la siesta posprandial. La disfrutarás solo si posees una habitación al fondo de la casa, aislada del mundanal ruido, porque si no es así, amenizarás tus tardes apreciando la afinación del expendedor de helados a cinco pesos, en su inigualable imagen. Pedaleando sobre el triciclo, intercala la voz proponiendo su gélida creación con un acompañamiento musical parecido a los que animan los arbolitos de navidad. Suena dulce, quizá un tanto reiterativo.
Existen amplias propuestas, cada una con su singular pregón. Compro objetos de oro y los pago a buen precio; relleno fosforeras; arreglo colchones a domicilio; reparo cocinas de gas, batidoras, máquinas de coser, lavadoras. Vendo flores, tomates, lechuga, platanitos, habichuelas, pescado fresco, yogurt natural, miel de abejas pura, barras de guayaba, y no se pierdan el correteo del mercader furtivo con un saco de papas para “tirarlas”, lo más rápido posible, a diez pesos la libra. El principal atractivo de estas ofertas es el factor sorpresa, pues aterrizan sin días fijos en la semana.
Los pregones del barrio son así, incluso, a sus protagonistas les ha tocado enfrentar la desproporcionada rivalidad impuesta por la música casera a todo volumen y otras bullas callejeras que —de cierta manera— les escamotean la atención de sus potenciales compradores, quienes ya en la noche desean ver el noticiero de televisión, las novelas, el juego de pelota, o simplemente pretenden descansar después de una agitada jornada laboral.


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alfonso nacianceno dijo:
21
27 de marzo de 2014
13:13:22
alfonso nacianceno dijo:
22
27 de marzo de 2014
13:15:10
tamara dijo:
23
27 de marzo de 2014
15:09:43
alfonso nacianceno dijo:
24
27 de marzo de 2014
16:54:42
Eduardo Navarro Rodriguez dijo:
25
29 de marzo de 2014
00:54:24
Alberto lopez dijo:
26
31 de marzo de 2014
03:47:54
Paladin dijo:
27
31 de marzo de 2014
22:05:53
Ghost dijo:
28
1 de abril de 2014
01:53:01
Daris Eudel Rodriguez Perez dijo:
29
2 de abril de 2014
12:38:37
Rogescorpion dijo:
30
2 de abril de 2014
22:13:05
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