Entre los días 5 y 12 de enero se desarrolló el VIII Congreso del Partido del Trabajo de Corea (PTC). La magna cita partidista reunió en Pyongyang a más de 4 000 delegados, quienes discutieron trascendentales asuntos de la vida política, social y económica de la República Popular Democrática de Corea.
El Informe Central realizó un profundo balance de los trabajos del VII Periodo del Comité Central y presentó los nuevos lineamientos y orientaciones estratégicas para continuar la construcción socialista en la hermana nación.
El documento refleja también los avances alcanzados por el pueblo coreano bajo el liderazgo del Partido en los últimos cinco años, a pesar de las dificultades que el régimen de sanciones impone al país, en el contexto de la crisis mundial provocada por la pandemia de COVID-19 y de los efectos de los severos eventos climatológicos que han azotado a esa nación.
El Congreso aprobó una resolución de modificación de los Estatutos del Partido, para atemperarlos a las actuales condiciones. Durante el cónclave tuvo lugar la elección de los miembros de las estructuras superiores del Partido, incluidos el Comité Central y el Presídium del Buró Político, ocasión en la que el compañero Kim Jong Un resultó electo como Secretario General del Partido del Trabajo de Corea.
Los acuerdos y resoluciones emanadas del VIII Congreso del PTC apuntan a consolidar la capacidad directiva y autoridad del Partido como fuerza política encargada de conducir al pueblo coreano hacia la conquista de una sociedad cada vez más desarrollada, equitativa y soberana.
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