Préstamo del FMI: ¿por qué a la Argentina de Macri sí y a la Venezuela revolucionaria no?

El Fondo Monetario Internacional (FMI), el mismo organismo financiero que otorgó un préstamo de 50 000 millones de dólares al Gobierno proyanqui del expresidente Mauricio Macri, en Argentina, desestimó la petición del Ejecutivo venezolano de un préstamo de 5 000 millones para frenar la pandemia de coronavirus.

«Desafortunadamente, el Fondo no está en condiciones de considerar esta solicitud», «porque no hay claridad» sobre el reconocimiento internacional del gobierno de ese país sudamericano, ha dicho este martes un portavoz del organismo multilateral.

Horas antes, el canciller de Venezuela, Jorge Arreaza, había informado que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, realizó la solicitud del fondo de emergencia, con el cual el país bolivariano podría «fortalecer las capacidades de respuesta» del sistema de salud local a la propagación del nuevo coronavirus.

El préstamo pedido por Venezuela, nación que sufre una férrea guerra económica urdida por Estados Unidos, que la somete a carencias y sufrimientos inauditos, estaba destinado a salvar vidas, a enfrentar la pandemia. El dinero que el FMI «generosamente» entregó a Argentina en 2018, estaba dirigido a dar un fuerte respaldo a la gestión impopular del entreguista Mauricio Macri, a endeudar a los argentinos, a esquilmar a la nación sudamericana.

El «instrumento del mismísimo demonio», como bien llamó Maduro al FMI no está concebido para brindar ayuda desinteresada, es una herramienta de colonización, de dominio imperial.