
CARACAS.—El presidente venezolano Nicolás Maduro afirmó este jueves que en la nación sudamericana hay dos poderes en pugna: «el de la oligarquía proimperialista y el de un pueblo que quiere avanzar con su propio esfuerzo».
«Es una pugna dura, cruda, total, sin mediastintas, con la economía como centro», dijo el mandatario, al encabezar el homenaje al Comandante Hugo Chávez ante el sepulcro que guarda los restos del líder bolivariano en el Cuartel de la Montaña, a cuatro años de su memorable y último mensaje televisivo al país.
Maduro aseveró que la batalla económica en Venezuela se expresa en dos modelos: «el parasitario, ladrón, especulativo» dirigido desde Miami y apoyado por la oposición nacional, frente al revolucionario que crea riquezas a través del trabajo, «solidario, incluyente, que defiende los derechos sociales del pueblo».
Subrayó que el año 2017 será de consolidación para la Revolución Bolivariana, «un año que inicie un nuevo ciclo en la expansión de esa fuerza fundada por Hugo Chávez», en el cual «debemos pasar de la resistencia y el sacrificio a la ofensiva productiva y total», señaló.
«Es hora de unir la inteligencia colectiva del país, defender más que nunca la unión cívico-militar, que es la marca fundacional de Bolívar y de Chávez, porque nuestro país primero fue Ejército y después República, como primero Chávez fue soldado y luego presidente».
El jefe de Estado venezolano reseñó el ascenso paulatino de la arremetida imperialista contra los gobiernos progresistas de América Latina, que comenzó en el 2009 con el golpe de Estado en Honduras, siguió en Paraguay, tuvo intentos en Ecuador y se relacionó también con las enfermedades casi simultáneas de los líderes de izquierda del continente, que cegaron la vida de Néstor Kirchner y Hugo Chávez.
Defendió la resistencia de la Revolución Bolivariana como una causa de toda Latinoamérica, pues «la batalla actual de nuestros pueblos es continental: o todos unidos o todos hundidos».
En ese propósito de lucha, Maduro evocó las figuras legendarias de Chávez y Fidel, «dos grandes que hacen nuestros compromisos más realistas y profundos. Sigamos conectados con esos espíritus trascendentes, que convierten a los pueblos en gigantes».
El 8 de diciembre del 2012, el Comandante Hugo Chávez, consciente de las complicaciones de su enfermedad, dirigió su último mensaje televisivo al pueblo venezolano, en el que pidió mantener la unidad sobre todas las cosas, para defender y continuar la Revolución Bolivariana ante cualquier dificultad.
En la ocasión, también exhortó al país para que, en su posible ausencia definitiva, eligieran a Nicolás Maduro como presidente de la República.
Bajo el mandato del jefe de Estado obrero, justo en el primer aniversario del mensaje del Comandante Supremo, el 8 de diciembre fue instituido como Día del Amor y la Lealtad a Chávez.















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Miguel Angel dijo:
1
9 de diciembre de 2016
02:57:17
francisco dijo:
2
9 de diciembre de 2016
08:24:49
Kino dijo:
3
9 de diciembre de 2016
17:10:18
neidis dijo:
4
14 de diciembre de 2016
07:43:58
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