ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
Foto: Cartel de la película

Un club de jazz ha llevado de vuelta a Esteban Insausti al set de filmación, específicamente las historias que en él transcurren y que le darán vida al tercer largometraje de ficción del realizador cubano. Tres cuentos: Saxo tenor, Contrabajo con arco y Piano solo, ambientados en épocas diferentes (finales de la década del 50, años 90 y la actualidad, respectivamente), conforman entonces Club de jazz, en pleno rodaje.

Pero no se trata de una película musical, asegura Insausti, sino “un drama sobre la envidia, sobre el conflicto que tiene mucha gente con la gloria ajena, con el talento ajeno, y tiene como subtexto un club de jazz”.

Asimismo, la historia no se circunscribe a La Habana, a Cuba, sino que está ambientada de una manera que pueda funcionar en cualquier lugar del mundo, pues los conflictos son bastante universales.

Club de jazz cuenta además con la dirección musical de Juan Manuel Ceruto y dos directores de fotografía: Ángel Alderete y Alejandro Pérez, con el mismo concepto estético o la misma iluminación, en una cinta donde reinan las sombras y alejada del estilo más tradicional del cine cubano.

“A mí me interesan más las sombras que la luz. Aquí las actuaciones son muy contenidas, no hay nada exterior, las emociones están más bien a nivel visceral, desde adentro”, comentó Insausti.

El proyecto, concebido mucho antes de Larga distancia, anterior largometraje del también guionista y productor, contará con las actuaciones de Luis Alberto García, Mario Guerra, Héctor Noas, Yailene Sierra o Claudia Valdés, entre muchos otros, quienes han tenido una preparación especial con profesores de música, de solfeo, de armonía o entrenamiento especial con los instrumentos que tocan en la película.

A partir de que cada cuento refleja una época distinta, la ambientación del club va cambiando, sin afectar su arquitectura, sino apelando a pequeñas variaciones en cuanto al diseño interior, las mesas, las lámparas, etcétera.

Toda la película será en blanco y negro, y las gamas serán trabajadas según las historias. Saxo tenor, por ejemplo, tiende más hacia los oscuros con
grises combinados, mientras que Contrabajo con arco será más contrastado, y en Piano solo predominará lo blanco y gris.

El fin del rodaje está previsto para mediados del mes de abril, cuando comenzará entonces todo el proceso posfilmación que llevará, quizá a principios del año próximo esta nueva entrega de Esteban Insausti a las salas de estreno de todo el país.

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A. Del Toro dijo:

1

22 de enero de 2019

12:54:25


Pocas veces he visto una película Cubana de tan alto nivel, no solo estético también por la profundidad de su argumento, que corre el riesgo de ser leída desde lo que no es. Imparto letras en la universidad de la Habana hace más de 20 años y pude apreciarla junto algunos de mis mejores alumnos en el cine Riviera y nuestra conmoción fue absoluta, he leído un insano y patético ataque personal (porque crítica cinematográfica dista mucho de ser) que pareciera hecha por uno de los personajes negativos de este grandioso Film. Mario Guerra está en uno de sus mejores trabajos, una caricatura puede parecer en otros filmes que apenas se mencionan, pero aquí hizo historia. Club de jazz es un de demoledor retrato de quienes también conforman para mal nuestro paisaje urbano. Larga vida mientras esperamos deseosos más películas con este nivel de honestidad y rigor