ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
La escritora española Ana María Matute.

Una de las autoras más representativas de las letras españolas, la es­critora catalana Ana María Matute, Premio Cervantes 2010, falleció ayer a los 88 años de edad en su casa de Barcelona, su ciudad natal.

Matute, considerada una de las más altas voces de la narrativa de la posguerra civil y de la literatura in­fantil y juvenil, cuya obra constituye un referente obligatorio de la sociedad española contemporánea, nació en 1925 y mereció, entre otros, los premios Planeta, Nadal y el Na­cional de las Letras Españolas en 2007.

Autora de obras como  la trilogía de Los Mercaderes, El polizón de Uli­ses y Olvidado rey Gudú, construyó un discurso  ensayístico en el que  de­finió la historia más reciente de la literatura española. Convencida de su pasión por la creación literaria, Matute aseguró haber muerto tempranamente de no haber podido “participar del mundo de los cuentos y si no hubiese podido inventarme mis propios mundos.”

Al fallecer, la célebre escritora trabajaba en su novela Demonios fa­mi­liares, que verá la luz en septiembre con sello editorial de Destino. De su más reciente producción literaria la autora había adelantado la frase inicial: “Algunas noches el coronel oía llorar a un niño en la oscuridad”. Al respecto comentó: “El libro que estoy escribiendo ahora es muy bo­nito, es lo único que puedo decir.”

Un rasgo que la distinguió en su elocuente conversación fue referir­se a sí misma en tercera persona. “¡Cosas de la Matute!”, solía decir. Defensora acérrima de la ortografía y el buen decir  aseguraba que de joven, si era seducida por algún pretendiente con errores ortográficos, así  fuera el chico más guapo del mundo lo descartaba rápidamente.

Ante la noticia de su fallecimiento el  ministro de Educación, Cultu­ra y Deporte, José Ignacio Wert, declaró que “se pierde a una gran escritora catalana en español”, por lo que es “un día triste para las letras españolas”. Por su parte la Real Aca­demia Española de la que la Matute era in­tegrante lamentó el fatal suceso y suspendió la sesión de trabajo de es­te jueves en señal de luto.

El escritor Enrique Vila-Matas refirió que para la Académica la es­critura fue destino, “porque siempre supo que ese era su camino”.

“La palabra —definió en una ocasión Matute— es la alarma de los humanos para aproximarse unos a otros. La palabra es lo más bello que se ha creado, es lo más importante de todo lo que tenemos los seres humanos. La palabra es lo que nos salva”. Gracias a la suya Matute se­gui­rá viva en cada generación que se arrime a su literatura.

COMENTAR
  • Mostrar respeto a los criterios en sus comentarios.

  • No ofender, ni usar frases vulgares y/o palabras obscenas.

  • Nos reservaremos el derecho de moderar aquellos comentarios que no cumplan con las reglas de uso.