El ganador será…

Borrón y cuenta nueva. Los aficionados beisboleros acompañarán su fin de año con lechoncito, brindis y mucha pelota. La segunda ronda de refuerzos y las expectativas de la postemporada le dejaron la mesa servida.

¿Qué equipo se sirvió con cuchara llena? ¿Cuál será el ganador y representante cubano a la Serie del Caribe en Culiacán, México? ¿El director al IV Clásico Mundial será al fin el vencedor del torneo casero? Todas estas preguntan sazonarán los últimos y primeros días del 2016 y el 2017, respectivamente.

En mi opinión, el asunto pasa por cuál de los conjuntos venía ya más redondeado. Ciego de Ávila, al que considero el más balanceado para la batalla de enero, inició en agosto pasado con una sólida pareja de abridores con Vladimir García y Dachel Duquesne. Para la segunda vuelta atrapó a Vladimir Baños y se hizo de dos brazos de lujo para cubrir la faena del trío, el del joven y rapidísimo Raydel Martínez y el del mejor cerrador del país, José Ángel García. Ahora suma a Erlis Casanova, quien junto a otro de destacada faena, Liomil González, sella un cuerpo de pitcheo con pocas lagunas y superior a sus tres adversarios.

Roger Machado tapó con rigor el hueco que le dejaron José Adolis García y Luis Robert, que decidieron abandonar a su equipo y a la pelota cubana. Julio Pablo Martínez es ese hombre útil y capaz y alcanzó, creo que con justicia y astucia, a Dainier Gálvez para la segunda base. Buen bateador y defensor, que le permite regresar a Raúl González a su posición original, el tercer cojín. El campeón parece forrado con acero.

Villa Clara necesitaba de brazos frescos. El de Alberto Bicet, sin embargo, le aporta coraje y experiencia en estos partidos. Frederich Cepeda le causa un agradable dolor de cabeza: buscar que habite en la misma alineación con Malleta, Vizcaíno y Norel González. Y Alexander Ayala es siempre una carta de triunfo, además de necesaria para los naranjas. Llega a esta instancia con uno de los mejores tríos para aperturas. Si Freddy Asiel, Yosvani Torres y Alaín Sánchez, tienen continuidad en los relevistas —el lado flaco de los leopardos— este sería un aspirante serio.

Granma no es un elenco tan mediático como los otros tres. Pero demandaba poco, su ofensiva le mete miedo al susto y con el regreso de Alfredo Despaigne, es monstruosa. Lázaro Blanco, Yoalkis Cruz y Leandro Martínez le han cumplido, y ahora con Entenza de soporte más Lahera que ya estaba vestido de alazán, y una defensa que por mucho fue la mejor de la temporada, creo que pasa por el mejor momento para conquistar su primer banderín en las lides cubanas de las bolas y los strikes.

Y el recordista Matanzas, al que todos siguen, lo mismo para verlo perder que para ganar, fue el único que tomó tres lanzadores y todos relevistas, con Moinelo a la cabeza. Eso era predecible, aunque su mentor sea el más impredecible de los cuatro. A Víctor Mesa, como Carlos Martí, no le hacía falta mucho. Si esos brazos respaldan a la terna Yera-Montieth-Jonder, podrían al fin coronar el esfuerzo de un equipo que ha sido el que más juegos ha ganado en los últimos cinco años y que le ha dado a la Serie la pimienta que le faltaba.

¿El ganador? Solo digo que está difícil vencer a Ciego de Ávila. ¿El director del Clásico? Pregúntenle a Sherlock Holmes.