ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA

Cuba es la patria de todos, de los que aquí estamos y de los que, sin denigrar de ella, habitan al norte del Río Bravo. A 90 millas viven cerca de dos millones de cubanos que no han perdido, ni creo que quieran perder, el vínculo con sus familias. La mayoría tiene acá a sus viejos, hermanos, sobrinos y sus raíces.

¿A quién le conviene entonces una mala relación entre Estados Unidos y la Isla? ¿Cuál es la parte buena del bloqueo? ¿Puede ser feliz un cubano de allá, cuando a un pariente de acá le escasean los alimentos o las medicinas? ¿Está feliz el cubano de Miami porque las tiendas de Cuba tengan menos mercancías? ¿Puede sentir alegría el criollo en la Florida, al saber que sus remesas tienen que ser limitadas? ¿Quieren ver guerra en su barrio, bombas sobre sus escuelas?

Los cubanos quieren paz, los de adentro y los de afuera, pero los que están más lejos saben muy bien que acá adentro no se va a rendir la gente, aunque el plan siniestro sea justamente ese, mediante agobios y carencias. Está claro que los compatriotas de allá, que ahora viven en otro ambiente, saben que las presiones o los chantajes nunca han funcionado, sea cual sea el intento de doblegar a un cubano.

Entonces, nos queda claro, a los de aquí y acullá, que el bloqueo le conviene a los que ganan con él dos cosas que dominan la política anticubana: dinero que no reparten y votos que los sostienen.

Hagamos lo que nos toca dentro y fuera de fronteras; no dejemos que sea un poder extranjero el que decida sobre Cuba. Aquellos que así actúan nunca nos querrán y les importará siempre un comino si los de adentro hacen largas colas o los de afuera quieren ayudar, sin temor a linchamientos odiosos.

COMENTAR
  • Mostrar respeto a los criterios en sus comentarios.

  • No ofender, ni usar frases vulgares y/o palabras obscenas.

  • Nos reservaremos el derecho de moderar aquellos comentarios que no cumplan con las reglas de uso.