Está el bisonte imperial
sobre la tierra desnuda
cavando un hoyo de rabia
con su violenta pezuña.
El animal que digiere
cañaverales, y educa
con carbón y estaño y cobre
el vientre glotón, y suda
con sudores de petróleo
sus bárbaras calenturas,
olfatea el aire espeso
y apagar de un golpe busca
el trueno que lo ensordece
y el rayo que lo deslumbra.
Blanca paloma artillada
que en las olas se columpia,
sobre el caribe nocturno
enciende sus sueños Cuba.
Los milicianos la visten
de pólvora y de ternura,
y de hierro y de esperanza
y de granito y de espuma:
alta va en hombros del pueblo
sonriendo la patria pura.
Mira el bisonte la mar
con mirada de agua sucia;
la pezuña es ya un muñón
y aún cava la tierra dura.
¡Ay, imperio emperador,
bisonte sin sol ni luna,
el hoyo que estás cavando
será el de tu sepultura!
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Francisco Rivero dijo:
1
26 de mayo de 2019
10:51:15
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