ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA

No le creí a la vecina cuando me dijo que su niña, de solo 27 meses de nacida, ya pulsaba las teclas del celular para ver los muñequitos que ella le tiene grabados.

Aquello parecía una exageración de la madre, animada en presentarla a los ojos ajenos como una superdotada.

Ante mi incredulidad —desaprobada por la progenitora— le mostré interés por comprobar si no estaba escuchando una fábula nacida de su vasta imaginación. Así que a la mañana siguiente decidí acercarme sigilosamente a la ventana de la vecina que da al portal de su casa, en el intento de verificar si no había sido el destinatario de una exageración.

La pequeña se hallaba sentada en el suelo, rodeada por varios peluches, una muñequita de trapo y otros juguetes más. Haciendo caso omiso a esos acompañantes que la custodiaban, entre sus manitas sostenía un celular y, a juzgar por su nerviosa sonrisa, se divertía de lo lindo apretando las teclas cada vez que finalizaba una de las historietas grabadas en el aparato.

Después de corroborar lo asegurado por la madre, me escurrí lentamente hasta ganar la salida del portal, para evitar la pena de no solo tener que aceptar las afirmaciones de días pasados, sino pensando en cómo justificaría el haberme asomado a la ventana, en franca desconfianza.

¿De qué me había asombrado?, pensé al instante. Esos niños de hoy son los jóvenes que en un abrir y cerrar de ojos acceden a los centros de trabajo con un dominio absoluto de la computación, sus mañas y secretos, pues viven en un entramado mundial donde las noticias vuelan, se entrecruzan, capturadas por medio de diferentes soportes que nutren hasta a la saciedad el interés por conocer sobre cualquier tema.  

Comparé entonces la época en que los graduados universitarios de la carrera de Periodismo llegamos a los medios —a principios de la década del 70 del siglo pasado— y contábamos para ejercer la labor con una máquina de escribir, las informaciones cablegráficas emanadas de los viejos teletipos, la memoria recogida en el archivo del diario y, en el mejor de los casos, el concurso de una fuente viva de información, si los funcionarios al mando estaban dispuestos a ofrecer datos de valor.

Así se trabajaba en el Granma de esos tiempos, cuajado de hombres y mujeres de la noticia, en su mayoría curtidos en el diario devenir de varias décadas en el oficio, no pocos crecidos de manera empírica hasta su consagración, entregados a una profesión que preserva espacio a la longevidad de sus creadores.

Hoy los «nativos digitales» llenan las redacciones de este centro que puja por entregar un producto superior. Esos jóvenes —nacidos para conquistar la más moderna técnica en aras de ejercer el periodismo— no cejan en su afán de sumar conocimientos y habilidades en pos de la noticia, argumentarla y presentarla de manera amena a los lectores. Una fuerza así, espabilada, certera, que en promedio de edad no rebasa los 30 años, es la garantía del futuro.    

¿Acaso esos jóvenes que hoy conviven en las redacciones junto a los veteranos no han sido tan despiertos como la niñita de mi vecina?

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Tenesmo dijo:

1

13 de enero de 2017

15:56:21


Alfonso: Nuestra generacion (y las anteriores, por supuesto) estuvo obligada a pensar mas, a saber mas, a tener creatividad, entrenabamos mas la mente, sabiamos pensar... pues no teniamos esos recursos. Teniamos los libros para quemarnos las pestañas y desarrollar nuestra mente, la cultura, etc. El hecho de tener habilidades para las tecnicas digitales, no hace a las personas mejores profesionalmente, sobre todo cuando estas tecnicas digitales se han simplificado demasiado con los ambientes graficos, orientados a objetos, intuitivos hasta para los mas iletrados. Ponga usted a los mas brillantes de esos "genios" de la epoca digital, acostumbrados en mas de un 90% a Windows o Android, delante de una terminal en Linux o Unix, a teclear comandos para ejecutar verdaderos programas y digame que resultado obtendra. Solo eso. Para que decir hablar de mentes entrenadas en pensar cuando tienen informacion disponible (la buena, pero tambien la mala!!!) al alcance no ya de la mano, sino de un dedo, dando un simple click. No niego el desarrollo. Al contario!! Me aprovecho lo mas posible de este!!! Pero la mente, el razonamiento no se entrenan y la educacion general no se gana, sabiendo pulsar algunos iconos en una pantalla ...

el genio de la lampara Respondió:


16 de enero de 2017

08:50:33

@Tenesmo, saber pulsar un par de click, mas o menos rapido, o hacerlo a mas temprana edad no te hace un genio, pero te va preparando para ser mas intuitivo en un mundo cada vez más dinamico, más cargado de contenido y porque no, más confuso, donde es abosultamente necesario saber aprovechar estas tecnologías para poder organizar el cúmulo de conocimientos al alcance de un click. En esta era también, hay libros para quemarse las pestañas, y son mucho más accesibles que antes, por lo que el entrenamiento del conocimiento y la razón pasarán necesariamente por dominar las tecnologías al alcance que permitan ordenarlos. Y para ser muy buen ingeniero o profesional no es necesario saber teclear en Linux, o Unix si te refieres a tecnologías de servidores para ejecutar "verdaderos programas" pero si saber como manejar una computadora, sea Windows o Android, o Ubuntu, o Redhat, o MaC Os, aunque seas médico, arquitecto, periodista o poeta, pero no tienes que saber Linux o Unix. No menosprecies el aprender a dar unos cuantos clicks en un pantalla de smartphone, estos son los primeros pasos para entrar en el inmeso mundo del conocimiento de hoy.

Yesenia Felipe Martinez Respondió:


18 de enero de 2017

13:26:28

Compañero usted tiene toda a rasón,porque ultimamente el desarrollo de la tecnología nos ha llevado ha esto.Pienso que desarrollarnos es bueno,pero lo malo es perder esas viejas costumbres nos han servido de mucho,y creo que la mejor forma de estudiar o aprender es por un buen libro.

victor ramos dijo:

2

16 de enero de 2017

21:18:35


ay periodista nacianciano, ya esas cosas electrónicas no son para nosotros, por la fotico suya se ve que ya camina para los 80 igual que yo, si las piernas le responden, siga yendo a la oficina del periódico porque si se jubila lo van a poner a sacar el perro a pasear igual que a mi. Feliz 2017.

sachiel dijo:

3

18 de enero de 2017

09:56:53


Estimado periodista, el tema está en cómo, para qué y quienes usan esas "nuevas" tecnologias... y con 80 años se hace maravillas, victor ramos, allá usted si no puede.