Un fuerte dispositivo policial se mantuvo frente al edificio de los juzgados penales de Manhattan, en New York, Estados Unidos, en espera de la entrada del expresidente Donald Trump, que deberá comparecer en los próximos días ante un juicio sobre falsificación de documentos financieros.
En la Plaza colindante a la edificación hay grupos de manifestantes divididos entre los partidarios y los en contra, que se apuestan allí para hacer valer su demanda de inocencia o culpabilidad, custodiados por la policía y acompañados de un nutrido batallón de periodistas, describió la cadena BBC.
Por primera vez en la historia, un expresidente de Estados Unidos se sentará en el banquillo de los acusados de un juicio penal. Este lunes comenzó la selección del jurado; como parte del proceso penal que debe durar una semana, según estimaciones.
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