La exembajadora de Estados Unidos ante la Organización de Naciones Unidas, Nikki Haley consideró que sería increíblemente peligroso para la seguridad nacional el que fueran ciertas las nuevas acusaciones contra el expresidente Donald Trump, según trascendió en Prensa Latina.
Indica el medio que, durante una entrevista concedida al programa Face the Nation de la CBS, la también candidata a la nominación presidencial republicana, añadió, sin referirse a su confianza o no en el Departamento de Justicia, que si llega a la presidencia, «lo limpiará desde arriba.»
Anteriormente, la oficina del fiscal especial Jack Smith añadió otros tres cargos contra el exmandatario (2017-2021) en el caso de los documentos clasificados hallados en su residencia de lujo en Mar-a-Lago, Florida.
La actual imputación -reseña- alega que Trump mostró en 2021, en dos ocasiones, esos materiales sensibles en su club de golf en Bedminster, Nueva Jersey.
Similar proceder tuvo con un grupo de escritores, a quienes, según se dice, les enseñó un documento descrito en la acusación como una «presentación relativa a la actividad militar en un país extranjero» y marcado como muy secreto.
«Sabe, cuando yo estaba en Naciones Unidas, había normas realmente estrictas sobre cómo se manejaba la información clasificada», señaló Haley, quien fue embajadora de Trump entre 2017 y 2018 en el máximo organismo multilateral.
Cuando le preguntaron sobre los presuntos esfuerzos de Trump para eliminar en el verano de 2022 los videos de las cámaras de seguridad de Mar-a-Lago buscadas por un gran jurado federal, Haley enfatizó: «nada de eso suena bien».
La reciente acusación imputa a Trump y a otras dos personas, Carlos De Oliveira, administrador de Mar-a-Lago, y Walt Nauta, asesor de Trump.
Por otro lado, un grupo político (Save America) que apoya al exgobernante gastó más de 40 millones de dólares en costos legales en la primera mitad de 2023 para defender al expresidente, sus asesores y otros.
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