ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
Los incendios forestales causan gran cantidad de animales muertos y la variabilidad de los ecosistemas. Foto: Tomada de servindi

Unas 468 617 hectáreas en el oeste de Estados Unidos fueron dañadas por 80 grandes incendios forestales en 13 estados del país.

La cadena Telesur reportó que más de 19 700 bomberos forestales, personal de apoyo y 35 equipos especializados de manejo de incidentes, del Centro Nacional Interagencial de Bomberos, se encuentran desplegados intentando controlar el fuego.

La situación es grave desde el último fin de semana porque el ambiente meteorológico no ayuda, insisten las fuentes locales. Existen vientos fuertes con ráfagas de direcciones variables, elevadas temperaturas y se forman nubes de tormenta, lo que provoca una intensa actividad eléctrica sobre pasturas extremadamente secas. Cada rayo genera la posibilidad de nuevos focos.

Oregon y California son los dos estados más golpeados. En esos territorios se manejan cifras estremecedoras. En el primero se estiman 4 428 hectáreas afectadas y solo el 10 % del fuego contenido.

Mientras, en California se alerta sobre condiciones climáticas favorables a la propagación del fuego, así como de la posibilidad de incendios nuevos debido a tormentas eléctricas, como el ocurrido en la zona turística de Lake Tahoe.

Una ola de calor del noroeste del Pacífico de finales de junio, que rompió récords de altas temperaturas en Estados Unidos y Canadá, sumada a la sequía por las escasas lluvias, se convierte en principal aliada de los incendios. 

Los estados de Montana con 18 focos y de Idaho con 17, también están afectados. La zona boscosa de Bootleg tiene al mayor de los 80 grandes incendios activos actualmente en Estados Unidos, el cual se extendió durante la noche de unos 1 100 km² a 1 170 km², tres veces el área de la metrópoli de Detroit, según reporta la agencia AFP.

Las imágenes de satélite del servicio meteorológico nacional mostraron una enorme columna de humo que se elevaba por Bootleg, en el sur de Oregón, hasta la frontera con Canadá, cientos de kilómetros al noreste.

Los científicos dicen que el cambio climático amplifica las sequías, que crean a su vez las condiciones ideales para que se propaguen los incendios forestales, pero el gobierno de la Casa Blanca aún no emite una respuesta inmediata ante los problemas ecológicos y se niega a suscribir pactos internacionales con estos propósitos.

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