Parecería que el inicio de la delicada situación en que se debate hoy República Dominicana comenzó el pasado 16 de febrero, cuando se paró el proceso de votación en las elecciones municipales, al detectarse fallas en las máquinas, por primera vez instaladas para el registro de los votos.
Luego de la aciaga jornada, la nación caribeña se estremece cada día por las movilizaciones populares, principalmente de jóvenes, que han unido a la inconformidad por el fallo del proceso, la demanda de otras acciones de beneficio popular y de garantía democrática.
Lo ocurrido cuando se interrumpió el voto automatizado, todavía no está del todo aclarado, y eso ha echado más leña al fuego de la insubordinación ciudadana.
«Es un hecho lamentable y bochornoso, que empaña la democracia dominicana», consideró el presidente Danilo Medina, luego de la paralización de los comicios.
Por su parte, la politóloga Olaya Dotel, profesora de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, dijo a bbc Mundo que «este proceso de movilización que se está produciendo no es el resultado de este momento en particular, ha sido la gota que desbordó la copa».
En tanto, desde la Plaza de la Bandera, epicentro de las manifestaciones que ya cumplieron 12 días, uno de los cientos de jóvenes que participan exclamó, según la propia agencia de noticias, que «la democracia está en peligro, en consecuencia, debemos luchar por ella».
Un reporte de CNN señala que durante las protestas escenificadas en las afueras de la Junta Central Electoral, se exige que haya «transparencia en las elecciones extraordinarias convocadas para el próximo 15 de marzo».
El expresidente Leonel Fernández declaró a Listín Diario, el principal periódico del país, que lo ocurrido «no fue ni sabotaje, ni error, ni caso fortuito. Para el grueso de la población, lo que en realidad ocurrió en las elecciones municipales fue un crimen flagrante contra la democracia dominicana».
El caso es que –según reportes de prensa– la nación había invertido 19 000 000 de dólares en la compra de más de 50 000 máquinas electorales para estos comicios, considerados una prueba para las presidenciales del próximo 17 de mayo. Además, el costo total de la organización ascendió, según medios locales, a más de 60 000 000 de dólares. Las autoridades electorales anunciaron que la mitad de las máquinas no funcionaban.
Pero, una vez descalificado el mecanismo, salieron a relucir anomalías que van mucho más allá de un fallo técnico. Ojalá ambos problemas queden resueltos de cara a la repetición de estos comicios municipales, el próximo 15 de marzo, y los presidenciales del 17 de mayo.
COMENTAR
Ciro dijo:
1
4 de marzo de 2020
23:09:52
Responder comentario