Se desata polémica en Reino Unido tras la compra de ojivas nucleares a EE. UU.

El gobierno británico se había comprometido con Estados Unidos a comprarle una nueva generación de ojivas nucleares para su sistema de misiles Trident, sin informar antes al Parlamento, revela hoy la prensa local.

Según el diario dominical The Observer, un alto oficial del Pentágono expuso los planes de compra del Reino Unido durante una comparecencia la semana pasada ante el Comité de Defensa del Senado norteamericano.

Este esfuerzo también apoyará un programa paralelo de ojivas de reemplazo en el Reino Unido, cuyo elemento disuasorio nuclear juega un papel absolutamente vital en la postura de defensa general de la OTAN, asegura el periódico que declaró el almirante Charles Richard, jefe del Comando Estratégico, al explicar la nueva arma llamada W93 o Mk7. La revelación cayó como una «bomba» dentro de los círculos parlamentarios británicos, donde se cuestionan por qué se enteraron de la decisión, que implicaría un gasto de miles de millones de libras esterlinas, después de que aparentemente ya fue tomada.

El líder interino del Partido Liberal Demócrata, Ed Davey, calificó, por ejemplo, de totalmente inaceptable que el gobierno haya dado luz verde al desarrollo de una nueva arma nuclear sin someterlo antes a consulta.

El hecho de que decisiones importantes sobre la defensa del Reino Unido sean debatidas en Estados Unidos, y no en el país, es escandaloso. Con (el primer ministro Boris) Johnson, todo parece indicar que nosotros debemos hacer todo lo que (Donald) Trump decida, advirtió Davey a The Observer.

Cita también a Tom Plant, del tanque pensante sobre seguridad y defensa Rusi, para quien la falta de un debate previo en el Parlamento resulta preocupante.

Aunque el ministerio británico de Defensa informó a la Cámara de los Comunes antes de Navidad que estaba trabajando para reemplazar las ojivas nucleares, el reporte señaló que el anuncio se haría a su debido tiempo, recuerda el diario.

Al parecer Londres y Washington habían acordado no revelar esos planes durante el receso navideño del Parlamento, pero los funcionarios del Pentágono aparentemente pasaron por alto ese detalle y pusieron en un aprieto al gobierno británico, agrega.

El Reino Unido cuenta con cuatro submarinos de la clase Vanguard armados con ocho misiles portadores de 40 ojivas nucleares cada uno.

Según las autoridades británicas, la flota tiene un efecto disuasorio, por lo que mientras uno de los sumergibles se mantiene permanentemente en el mar, los tres restantes están en mantenimiento, en su base de Escocia o en ejercicios de entrenamiento.

(Tomado de Prensa Latina)