ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
Los tiroteos en las escuelas estadounidenses son cada vez más frecuentes. Foto: EFE

La imagen de los narcotraficantes famosos, de sus mujeres, de sus hazañas criminales, se ha venido idealizando con los años. Las llamadas narconovelas, muy exitosas, han hecho una notable contribución para construir una visión romántica de estos asesinos. Hay además todo un aparato propagandístico y empresarial trabajando en el mismo sentido. Se habla de narcoestética y narcocultura, de narco-clothing o narco-ropa.

Pablo Escobar y «el Chapo» Guzmán, entre otros zares de la droga, cuentan con líneas de moda propias. La nueva colección «El Chapo 701» se presentó en julio en una feria, con ropa deportiva, gorras, jeans, sacos, vestidos, cinturones. Los artículos muestran el rostro del capo o el número 701, que es el puesto otorgado a Guzmán por la revista Forbes en su lista de 2009 de los hombres más ricos del mundo.

Según un analista, el jean sin bolsillos, apodado «levantacola», con un diseño que acentúa las curvas de «la mujer latina», surgió en Medellín como fruto de la narcocultura. El narcotraficante expone a sus amantes como «trofeos». Y una «mujer-trofeo» debe ser opulenta, exuberante, codiciada por todos, y requiere una indumentaria apropiada. El hecho es que el jean sin bolsillos colombiano se convirtió en una prenda muy demandada dentro y fuera del país.

Lo más doloroso es que el patrón de belleza y felicidad de muchas adolescentes en Nuestra América esté asociado a la «mujer-trofeo» que usan y ostentan los narcotraficantes, junto a sus ametralladoras, sus automóviles y sus montañas de dólares.

Voces autorizadas han denunciado los efectos de la narcocultura entre gente joven y pobre, que ve allí la posibilidad del salto milagroso hacia un mundo de abundancia. Atrocidades de toda índole están presentes en ese callejón sin salida: desde las cirugías estéticas peligrosas a que se someten las muchachas en su carrera para aproximarse al biotipo deseado, hasta el fervor casi religioso por las armas de fuego y la sangrienta iniciación de niños como sicarios.

Es obvio que las corporaciones de la moda se concentran en hacer dinero, sin detenerse en miramientos éticos. Las marcas (dijo Naomi Klein hace muchos años) no se dedican a vender productos sino estilos de vida. Cuando un joven asume la narco-moda, muestra cierta dosis de simpatía hacia ese «estilo de vida» y lo difunde en su entorno.  

Por otra parte, la marca estadounidense Bstroy presentó su colección «primavera/verano 2020» en Nueva York, con unas prendas deportivas (sudaderas) que lucían agujeros al modo de impactos de bala y los nombres siguientes: «Columbine», «Virginia Tech», «Sandy Hook» y «Stoneman Douglas». Hacían referencia a instituciones educativas donde se habían producido tiroteos masivos: el Instituto de Columbine, Littleton, Colorado (1999), con saldo de 15 muertos y 23 heridos; la Universidad Técnica de Virginia (2007), 32 muertos y más de 30 heridos; el colegio de primaria Sandy Hook de Newtown, Connecticut (2012), 27 muertos (de ellos, 20 niños) y dos heridos; y la escuela secundaria Stoneman Douglas de Parkland, Florida (2018), 17 muertos y 14 heridos. 

Se alzó un coro de protestas en las redes y en algunos medios de prensa, aunque los directivos de Bstroy dijeron que se proponían sensibilizar a la gente en torno a los tiroteos en escuelas.

El padre de una niña asesinada en Stoneman Douglas tuiteó: «Esto me ha enojado mucho. Si conoces a alguien involucrado con esta línea de ropa, por favor pídele que la detengan de inmediato». El escritor Cliff Schecter dijo que se trataba del «tipo de cosas que solo un sociópata podría inventar». «Estoy horrorizado», comentó uno de los dolientes de Columbine, «esto es asqueroso, puedes llamar la atención de otra manera, pero no te atrevas a ganar dinero con nuestra tragedia». En Twitter, la fundación que honra a una maestra asesinada en Sandy Hook publicó: «Una compañía se está burlando de nuestro dolor y del dolor de los demás». «Solo quieren lucrar», dijeron muchos y exigieron que las sudaderas fueran retiradas de la exhibición.

Pero el escándalo ha servido para dar publicidad al proyecto. Un vocero de Bstroy afirma que la idea inicial era que las sudaderas se mostraran únicamente en el desfile, pero «visto el éxito», están planeando ponerlas a la venta para el público general.

No olvidemos aquella frase de un personaje de Dostoievski: «Si Dios no existe, todo está permitido». Un ateo podría decir: «Si no hay sentido ético, todo está permitido». Está claro que para los que buscan ganar dinero a costa del culto a la muerte y a la violencia no existen ni Dios ni sentido ético alguno.

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Francisco Ruiz dijo:

1

1 de noviembre de 2019

07:10:38


Excelente, amigo Abel. Han pasado los siglos y todavía los asesinos imperiales usan los "esoejitos rotos" para cambiárnolos por nuestro oro, nuestros pensamientos. Y proclaman desga^nitados que legó el fin de la historia y de las ideologías. Con esos mismos métodos, impulsaron las "revoluciones" de colores en el antiguo campo socialista. Hay que reconocer que los aportes científicos de Marx y Engels, se los estudiaron muy bien, deuda histórica de los que se proclaman, desde la acera opuesta, marxistas y del Manifiesto Comunista no han pasado. Y han llevado a millones de jóvenes a la desocialización, el edonismo y a creer que tener algún trapo y mies de cosas inútiles, es el sueño de cómo debe ser el paraíso. Como soy profesor de Física, un muchachote de mi barrio fue y me pidió una fórmula física de la acción reacción para tatuarla n su piel. Él de Física no sabe ni la F. Sólo sabía que "socios" de él se habían tatuado la famosa E igual a m por c al cuadrado. Fórmula de laTeoría de la Relatividad. Y muy mal interpretada hasta por mucos físicos. Por mucho que resumí, iba a necesitar toda la espalda para el tatuaje. Infeliz. La idea de los demonios genocidas es vaciar las mentes. Al debatir con la muchachada estos disparates, algunos me argumentan que quieren ser diferentes a los demás. Tontos, no saben ni quieren saber que a pesar de todos ser una sola raza no ha habido, ni hay ni habrá otro ser humano con el mismo iris de los ojos que el nuestro, por sólo citar un ejemplo. Somos únicos, desde antes de nacer. Por otro lado el Héroe Nacional nos legó, entre tantas ideas creadoras, aquello de: - La mujer ama en el hombre su inteligencia. Mi experiencia de vida me confirma esta realidad. Nosotros los hombres estamos obligdos a ser limpios y vestir con prestanza y ser amables y cuidadosos en el trato con esas maravillas, que son nuestras mujeres.

opina dijo:

2

1 de noviembre de 2019

09:02:37


Muy bueno el tema, y es así, los dueños de las marcas de seguro contratan muy buenos equipos de investigación para crear productos que vayan directo a urgar en la sensibilidad de diversos públicos, crean la polémica y pafff como se dice, bien o mal pero que hablen, de ahí que se interesen por comprar el producto y luego se convierte en moda.