Ayer el presidente norteamericano firmó una proclamación de inmigración con el objetivo de impedir que la caravana de migrantes que se dirige hacia EE. UU. pueda pedir asilo.
Esta medida, pone en vigencia las regulaciones adoptadas el pasado jueves 8 de noviembre, las cuales anulan las leyes estadounidenses que permiten que cualquier persona sea elegible para el asilo, sin importar cómo ingrese al país, afirmó RT.
La propuesta, llamada Regla Final Provisional, fue presentada por el fiscal general interino Matthew Whitaker y la secretaria del Departamento de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen.
Mediante esta disposición el migrante que llegue al país norteamericano sin el visado correspondiente puede ser deportado y no tendrá la oportunidad de pedir asilo.
Como parte de sus acciones para frenar la entrada de los inmigrantes centroamericanos, Trump presentó su propuesta de poner fin a Daca, programa que protege de la deportación a los jóvenes indocumentados que llegaron al país siendo niños.
Sin embargo, la Corte de apelaciones de California falló en contra del mandatario y los instó a continuar con esta iniciativa puesta en marcha por su antecesor, Barack Obama, según informó El Comercio.
La caravana de migrantes centroamericanos partió de sus países de origen con el objetivo de buscar un destino lejos de la violencia y la inseguridad económica que viven en sus hogares.
El medio español ABC publicó que actualmente se encuentran en México, donde en el día de ayer cientos de ellos protagonizaron una protesta frente a la sede de la ONU para ser trasladados hasta la frontera.
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