ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
Gobierno de ALemania. Foto: El País

BERLÍN.–La canciller Angela Merkel, ganadora de las elecciones del pasado 24 de septiembre en Alemania, estimó el pasado lunes, que unas nuevas elecciones serían «mejor camino», que gobernar en minoría.

Por su parte el presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, llamó a los partidos a colaborar para encontrar una solución al bloqueo político que sufre la nación europea, informó El País.

«Espero que todos los partidos se muestren dispuestos a entablar conversaciones para formar Gobierno en un futuro próximo», indicó Steinmeier, tras reunirse con Merkel.

A su vez, agregó que se trata de una situación inédita en la historia alemana, pues esto no sucedía en la primera potencia del bloque desde hace 70 años.

No obstante Steinmeier conversará, próximamente, con los distintos partidos para reconducir la situación y buscar posibles acuerdos que eviten una repetición electoral.

Por otro lado Merkel certificó la muerte de la coalición, poco antes de que Christian Lindner, jefe de filas de los liberales anunciara las divergencias con los conservadores, pero sobre todo con Los Verdes.

«Es mejor no gobernar, que gobernar mal», apuntó Lindner.

Y es que conservadores, liberales y Verdes limaron sus discrepancias en materia de inmigración, cambio climático y fiscalidad a lo largo de casi cinco semanas. Esto después de maratónicas jornadas de negociaciones.

Recordemos que Merkel, con su partido, el bloque conservador CDU/CSU ganó las elecciones del pasado septiembre, aunque no logró la mayoría suficiente para formar Gobierno.

Tal hecho recrudeció las críticas contra la mandataria, cuyo final político tras 12 años al frente de Alemania, resulta cercano para muchos analistas.

La supervivencia de su cuarto mandato depende de su capacidad para levantar un gobierno de coalición, algo que de momento, no parece posible.

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Rogelio dijo:

1

22 de noviembre de 2017

03:06:53


En toda la historia de Alemania las luchas por la democracia a mediados del siglo 19 y hasta el triunfo del nacional socialismo un mandatario habia tenido tan baja popularidad. En el recorrido politico de la mandataria alemana se han sucedido actuaciones negativas que provocaron practicamente la recesion en ese pais. La tapa al pomo fue el no tratamiento que se dio a la avalancha de inmigrantes procedente de paises arabes lo que ha agudizado la crisis politica en ese pais. Lo malo de esto es que si quitamos al malo a quien ponemos ????

Yoandre Valdes Rodriguez Respondió:


22 de noviembre de 2017

10:52:54

Y que es un gobierno Malo para ud? En mi opinión hay un solo elemento, que engloba a muchos otros, para medir si un gobierno ha sido o es bueno o malo: se llama calidad de vida, si la calidad de vida del pueblo mejoró entonces el desempeño del gobierno ha sido bueno, si la calidad de vida empeoró entonces el desempeño del gobierno ha sido malo ahora analicemos algunos renglones de Alemania: - PIB (nominal) Puesto 4.º • Total (2016) US$ 3 467 780 millones.4? • Per cápita US$ 41 9854? - PIB (PPA) Puesto 5.º • Total (2016) US$ 3 934 664 millones • Per cápita US$ 47 5354? - IDH (2016) Sin cambios 0,9265? (4.º) – Muy alto Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/Alemania Otro elemento a tener en cuenta es el poder del pasaporte alemán el cual se encuentra en la segunda posición, detrás de Singapore, con 158 paises libre de visado en la práctica esto quiere decir que 158 paises confian en que si un alemán entra como turista a su pais la posibilidad de que se quede como inmigrante permanente es muy baja. Fuente: https://www.passportindex.org/byRank.php En fin @Rogelio sin ánimo de ofender debemos hacer añalisis más obejtivos y con menos fanatismo.

Andrés Respondió:


23 de noviembre de 2017

06:30:33

Yoandre, nadie está cuestionando el poderío de la economía alemana, ni su alto grado de desarrollo. Son estas cualidades las que han traído estabilidad a la economía alemana durante décadas y la han convertido en un nodo central en Europa. Es precisamente por eso que es relevante tomar en cuenta los elementos que han generado esta crisis política. Después de todo, Alemania era una de las naciones más industrializadas y cosmopolitas de Europa cuando Hitler llegó al poder. Pero cuando vino la crisis de 1929, Brüning, el canciller de entonces, aplicó un paquete de medidas muy parecido al paquete neoliberal aplicado por Merkel en Alemania. En el argot económico se le conoce a esto como “devaluación interna” y consiste simplemente restaurar competitividad a través del recorte de los costos de mano de obra, es decir, reduciendo salarios reales, prestaciones sociales, etc; en lugar de hacerlo a través del incremento de la productividad. Esta medida sumergió a la clase trabajadora alemana de entonces en gran inseguridad y precariedad. El periodo es complejo y las causas fueron variadas, pero la extrema desigualdad creada por Brüning fue definitivamente uno de los factores que más contribuyeron al crecimiento de Hitler. Muchos historiadores le llaman hoy a Brüning, no sin cierta razón, el enterrador de la república de Weimar. Hoy está ocurriendo algo similar. Se debe aprender de la historia. No hay peor ciego… No hay fanatismo en lo que dice Rogelio, es lo que está sucediendo y es irresponsable ignorarlo. Por otro lado, todo esto está bien documentado en cifras. Los indicadores como el PIB per cápita (nominal y PPA) y el IDH son importantes para tener una idea de los estándares de vida a nivel comparativo entre países, y aquí Alemania clasifica a sus anchas. Pero estos indicadores, incluso el IDH y el IDH considerando desigualdad (donde Alemania también califica muy bien) no dicen mucho de la forma en que el país está funcionando actualmente de acuerdo a sus propios estándares. Cuando se habla de pobreza en Alemania se habla de pobreza relativa, y es aquí donde hay preocupaciones, que evidentemente se reflejan en la población. Por ejemplo, según un reporte reciente de la OECD, Alemania es uno de los países, otrora sin niveles preocupantes de desigualdad, dónde ha habido un incremento más preocupante de desigualdad. Mirado entre 1985 y 2012, es el 6to país de la OECD donde más incremento de la desigualdad ha habido (en términos del imperfectísimo coeficiente Gini), inclso comparativamente. Por otro lado, el hecho de que el padre haya dejado una gran fortuna al hijo no quiere decir que esto sea el mérito del hijo. Todos los indicadores que muestras son un resultado cumulativo de los éxitos del modelo alemán de posguerra, que incluyó generosas prestaciones sociales y conoció niveles de productividad asombrosos. Nada de esto aplica al período de la Merkel, dónde lo contrario ha sido el caso. Esto se ve claramente cuando vemos la evolución del crecimiento de productividad alemana (medido en PIB/hora trabajada) desde 1950 hasta la actualidad. La explosión de productividad que le dio el buen nombre a Alemania ocurrió en el periodo 1950-1972 con un crecimiento del 6 %, sólo superada por Japón. Pero los periodos 1972-1995, y 1995-2004 (este último llamado periodo de “estancamiento”) también fueron significativos, aunque inferiores (entre el 2 y el 3 % en cada período). En cambio, la política de la Merkel, que coincide con el periodo 2004-hasta hoy, muestra los peores niveles de productividad del periodo de posguerra (por debajo del 1%). Muy por debajo de Corea del Sur, por debajo de Japón (país que se ha considerado estancado durante las últimas décadas), pero también por debajo del promedio de Latinoamérica. Esto habla por si sólo de la habilidad de este gobierno a la hora de estimular recursos productivos. Es por esa razón que cuando analizas la evolución del crecimiento del PIB per cápita durante el periodo de la Merkel (aprox 1,4%), te encuentras con el peor resultado de la historia de posguerra alemana (exceptuando el periodo 2001-2004). Todo esto por debajo de países como Ecuador, Indonesia o Kazajstán. Todo esto es coherente con estadísticas que sitúan a Alemania con uno de los niveles de peor remuneración de la mano de obra en Europa, donde, además, los trabajadores han estado sistemáticamente pagados por debajo del nivel de productividad, ya baja. No sorprende que, a pesar de vanagloriarse por haber reducido el desempleo, este país muestre, según datos de la propia Unión Europea, un preocupante porciento de trabajadores, incluso calificados, en alto riesgo de pobreza (de acuerdo a los estándares alemanes). En este sentido, los porcientos de Alemania, la principal potencia europea, están incluso por encima del promedio de la Unión Europea. Todos los especialistas y no-especialistas están preocupados con esta situación, precisamente por tratarse de Alemania. Todo esto explica el nivel de insatisfacción que existe en este país, y a través de Europa con la gestión de la Merkel. No todo lo que brilla es oro, ni se tapa el sol con n dedo Yoandre. Las cosas hay que mirarlas en perspectiva. Esta es la situación actual.

Andrés Respondió:


23 de noviembre de 2017

15:30:53

Yoandre, nadie está cuestionando el poderío de la economía alemana, ni su alto grado de desarrollo. Son estas cualidades las que han traído estabilidad a la economía alemana durante décadas y la han convertido en un nodo central en Europa. Es precisamente por eso que es relevante tomar en cuenta los elementos que han generado esta crisis política. Después de todo, Alemania era una de las naciones más industrializadas y cosmopolitas de Europa cuando Hitler llegó al poder. Pero cuando vino la crisis de 1929, Brüning, el canciller de entonces, aplicó un paquete de medidas muy parecido al paquete neoliberal aplicado por Merkel en Alemania. En el argot económico se le conoce a esto como “devaluación interna” y consiste simplemente restaurar competitividad a través del recorte de los costos de mano de obra, es decir, reduciendo salarios reales, prestaciones sociales, etc; en lugar de hacerlo a través del incremento de la productividad. Esta medida sumergió a la clase trabajadora alemana de entonces en gran inseguridad y precariedad. El periodo es complejo y las causas fueron variadas, pero la extrema desigualdad creada por Brüning fue definitivamente uno de los factores que más contribuyeron al crecimiento de Hitler. Muchos historiadores le llaman hoy a Brüning, no sin cierta razón, el enterrador de la república de Weimar. Hoy está ocurriendo algo similar. Se debe aprender de la historia. No hay peor ciego… No hay fanatismo en lo que dice Rogelio, es lo que está sucediendo y es irresponsable ignorarlo. Por otro lado, todo esto está bien documentado en cifras. Los indicadores como el PIB per cápita (nominal y PPA) y el IDH son importantes para tener una idea de los estándares de vida a nivel comparativo entre países, y aquí Alemania clasifica a sus anchas. Pero estos indicadores, incluso el IDH y el IDH considerando desigualdad (donde Alemania también califica muy bien) no dicen mucho de la forma en que el país está funcionando actualmente de acuerdo a sus propios estándares. Cuando se habla de pobreza en Alemania se habla de pobreza relativa, y es aquí donde hay preocupaciones, que evidentemente se reflejan en la población. Por ejemplo, según un reporte reciente de la OECD, Alemania es uno de los países, otrora sin niveles preocupantes de desigualdad, dónde ha habido un incremento más preocupante de desigualdad. Mirado entre 1985 y 2012, es el 6to país de la OECD donde más incremento de la desigualdad ha habido (en términos del imperfectísimo coeficiente Gini), inclso comparativamente. Por otro lado, el hecho de que el padre haya dejado una gran fortuna al hijo no quiere decir que esto sea el mérito del hijo. Todos los indicadores que muestras son un resultado cumulativo de los éxitos del modelo alemán de posguerra, que incluyó generosas prestaciones sociales y conoció niveles de productividad asombrosos. Nada de esto aplica al período de la Merkel, dónde lo contrario ha sido el caso. Esto se ve claramente cuando vemos la evolución del crecimiento de productividad alemana (medido en PIB/hora trabajada) desde 1950 hasta la actualidad. La explosión de productividad que le dio el buen nombre a Alemania ocurrió en el periodo 1950-1972 con un crecimiento del 6 %, sólo superada por Japón. Pero los periodos 1972-1995, y 1995-2004 (este último llamado periodo de “estancamiento”) también fueron significativos, aunque inferiores (entre el 2 y el 3 % en cada período). En cambio, la política de la Merkel, que coincide con el periodo 2004-hasta hoy, muestra los peores niveles de productividad del periodo de posguerra (por debajo del 1%). Muy por debajo de Corea del Sur, por debajo de Japón (país que se ha considerado estancado durante las últimas décadas), pero también por debajo del promedio de Latinoamérica. Esto habla por si sólo de la habilidad de este gobierno a la hora de estimular recursos productivos. Es por esa razón que cuando analizas la evolución del crecimiento del PIB per cápita durante el periodo de la Merkel (aprox 1,4%), te encuentras con el peor resultado de la historia de posguerra alemana (exceptuando el periodo 2001-2004). Todo esto por debajo de países como Ecuador, Indonesia o Kazajstán. Todo esto es coherente con estadísticas que sitúan a Alemania con uno de los niveles de peor remuneración de la mano de obra en Europa, donde, además, los trabajadores han estado sistemáticamente pagados por debajo del nivel de productividad, ya baja. No sorprende que, a pesar de vanagloriarse por haber reducido el desempleo, este país muestre, según datos de la propia Unión Europea, un preocupante porciento de trabajadores, incluso calificados, en alto riesgo de pobreza (de acuerdo a los estándares alemanes). En este sentido, los porcientos de Alemania, la principal potencia europea, están incluso por encima del promedio de la Unión Europea. Todos los especialistas y no-especialistas están preocupados con esta situación, precisamente por tratarse de Alemania. Todo esto explica el nivel de insatisfacción que existe en este país, y a través de Europa con la gestión de la Merkel. No todo lo que brilla es oro, ni se tapa el sol con n dedo Yoandre. Las cosas hay que mirarlas en perspectiva. Esta es la situación actual.

Andrés dijo:

2

22 de noviembre de 2017

08:20:33


Ese problema se lo ha buscado la canciller misma. Como dice Rogelio, su gestión ayudó a la crisis de la Eurozona. Ciertamente, la canciller está interesada en la estabilidad de Europa, pero en la Europa desde el punto de vista del capital alemán. Ha tratado de vender su gobierno como el esfuerzo por detener el desempleo, sin embargo lo que hecho es aumentar el subempleo y la precariedad y mostrarlos como empleo. En la práctica, su política estancó los salarios reales en Alemania, y por consiguiente en una buena parte de Europa, recortó el gasto público, aumentó el impuesto al valor agregado, liberó a los más ricos de pagar más impuestos, exigió draconianas normas a sus vecinos que ella misma no cumplió y ha dejado un record ambiental desastroso aunque se piense lo contrario, etc. En realidad, la visión y proyecto políticos que ella representa han sido precisamente la causa de gran parte de la inestabilidad que ha sufrido el continente, incluida su natal Alemania, cuyos escatológicos niveles de desigualdad han disparado la preocupación de organismos internacionales de primer orden, incluidos los nada izquierdistas OECD y FMI. Aún cuando la evidencia y muchos analistas dejaron bien claro la toxicidad de sus políticas ella prefirió ignorarlo y aferrarse a su fuero ideológico. Se insistió, sobre todo después de la crisis, en que si Alemania realmente quería preservar la estabilidad de la unión monetaria, debía adoptar una política fiscal expansiva y concentrarse en elevar sus salarios domésticos a largo plazo. Pero la austeridad impuesta por la Merkel fue lo que se impuso. La Alemania de la Merkel impuso su proceder neoliberal en todos los organismos de la EU, y por consiguiente al resto de sus vecinos, aunque esto haya contribuido al empobrecimiento de estos últimos. Esta Alemania no tiene nada que ver con el estado de bienestar que prevaleció en esa nación en la etapa de posguerra. En la práctica, la Merkel renunció a los pilares que permitieron rehabilitar a Alemania después de la segunda guerra mundial: 1) compromiso serio con Europa, 2) compromiso serio con el estado de bienestar, 3) compromiso serio con la desaceleración del conflicto Este-Oeste, asegurando relaciones respetuosas con Rusia. Pero todo lo contrario ha ocurrido. Alemania es la nación más fuerte de Europa, pero su establishment no actuó como un líder estabilizador, sino con miopía política, y no sin cierta dosis de mezquindad. Por ejemplo, benefició, deliberadamente, a través de su control sobre las instituciones de la EU, a sus propios bancos, permitiéndoles invertir en otros países sumas astronómicas sin evidencia plausible de retorno. Cuando estalló la crisis del 2008, y la subsecuente crisis de la Eurozona, lo primero que hizo este establishment, con la Merkel a la cabeza, fue tomar el dinero del contribuyente alemán para salvar a los bancos que habían creado la crisis. Los mismos bancos que habían recibido años antes vía libre para hacer lo que quisieran con los ahorros y las pensiones de ciudadanos alemanes y del resto de Europa. Todo esto se hizo sin siquiera garantizar la seguridad a los ahorros privados. De hecho ella criticó a otros países europeos que procedieron de ese modo. Dos días después de declarar esto, dijo que si los iba a garantizar, y al final resultó que era una jugada política sin respaldo legal alguno. Al final el dinero de los ciudadanos alemanes, ya esquilmados por los bancos y por los impuestos regresivos de su gobierno, se usó para pagar a los bancos, y sin garantía para sus depósitos. Aún hoy, una década después, siguen apareciendo secuelas de todo aquello. Cuando países del sur europeo, en especial Grecia, entraron en bancarrota a raíz de la crisis, la Merkel volvió a tomar dinero del contribuyente alemán, por segunda vez, con el pretexto de ayudar a los griegos y dijo que los griegos eran unos manirrotos. Esto, por supuesto, creó una hostilidad sin precedentes hacia esas naciones. En realidad, gran parte de la plata regresaba a los bancos alemanes y los griegos no recibían nada. Fue puro cálculo político. En medio de esta situación, impidió, a fuerza de intimidación descarnada, que los países más afectados de Europa, incluido el nuevo gobierno izquierdista griego, emplearan políticas económicas diferentes del paquete neoliberal de la EU para estimular sus economías. El resultado ha sido la desindustrialización de una buena parte de las naciones del sur de Europa, cuyas industrias no estaban en condiciones de competir con la de sus homólogos alemanes. Otra consecuencia fue la explosiva reaparición de niveles de pobreza e inseguridad que ya la Europa occidental industrializada creía parte del pasado. Otra consecuencia ha sido el incremento de la extrema derecha en toda Europa, y ahora le pisa los talones en Alemania. Cando estalló la crisis de los refugiados, gracias a la política exterior occidental, entonces la Merkel trató de mejorar su imagen acogiéndolos a todos sin límite, algo que en la práctica es insostenible. Le dijo a su pueblo “nosotros podemos”. Se trata del mismo pueblo acosado por la precariedad y la inseguridad, que ella misma ha contribuido a crear. La respuesta fue, naturalmente, de un rechazo rotundo. Incluso cuando importantes sectores de la sociedad alemana mostraron buena voluntad, el rechazo a estas medidas fue mayoritario. Obviamente, rápidamente cambió la política de bienvenida, que se transformó en una de abierta hostilidad. Cuando pidió ayuda a sus vecinos europeos para repartir a los refugiados, sus vecinos, en retribución a su egoísmo y unilateralismo, le dijeron que no. Entonces la Merkel se ha quedado con una papa caliente en la mano, que sólo pudo parcialmente pasar a su homólogo turco, después de haberlo criticado y tratado como un paria. Naturalmente, los votantes dejaron clara s molestia. Son demasiadas inconsistencias. La situación actual de la Merkel la hizo su propio gobierno, cuya política ha sido divisiva y excluyente.

la carta dijo:

3

22 de noviembre de 2017

10:07:57


Quitamos al malo a quien ponemos?En alemania hay democracia y cada partido defiende su linea o planes de trabajo,para mandar hay que tener mas del 50% ,por lo cual la mayoria de las veces se dirige en coalicion pero con 4 partido es muy dificil llegar un acuerdo, yo personalmente simpatiso con merkel su politica exterior creo que es buena y firme con su ideas de mantener la eu,la interior tiene sus cositas pero se recuperaron las finansas,con la cricis de los emigrantes de los paises arabes la mayor cantidad la cojio alemania y muchos paises de europa como bulgaria,polonia,etc dieron la espalda.entoce donde esta el malo.

Miguel Angel dijo:

4

22 de noviembre de 2017

13:33:29


No existen dudas q la poderosa Alemania está sumida en una crisis política, ya vaticinada por los analistas políticos a raíz del resultado de las elecciones de septiembre pasado, donde la Merkel "triunfó" sin la mayoría necesaria para formar gobierno, no sorprende la noticia. Han salido a relucir todas las discrepancias, diversidad de intereses que ponen en una engorrosa situación a la nación, la que predomina en casi toda Europa, salen a relucir los múltiples errores en la aplicación de políticas de corte neoliberal cometidos con anterioridad. Observemos como se desenvuelven los acontecimientos.

Andrés Respondió:


24 de noviembre de 2017

03:32:17

En efecto Miguel Angel. Veamos que sucede. Seguro encuentran algún parche por el camino, hay demasiados intereses en juego. Sin embargo, ha quedado en claro que el gigante tiene piernas de papel. En mi opinión, remediar esto a largo plazo requerirá necesariamente de un cambio estrctural y de un cambio profundo en la concepción política y económica de los que les toque dirigir.

Ruben dijo:

5

22 de noviembre de 2017

15:59:38


Pues yo no veo crisis política ni económica en Alemania lo que veo es una democracia donde tienen la posibilidad de votar por el partido, candidato y proyecto que ellos desean, lo que claro dificulta más lograr una mayoría. Y su líder por algo lleva tantos años en el poder. Del sol los europeos y algunos comentarios que leo por acá ven las manchas no reconocen que Alemania es el motor de Europa, no reconocen que Alemania es el pais que más aporta a la Unión Europea y claro al final algún beneficio tendrá porque de gratis nadie hace nada pero hasta ahora solo han tenido críticas y déficit fiscal de tanto que prestan e invierten en los demás países que podamos decir lo que queramos pero es real que tienen un menor nivel de desarrollo yo nunca entendí cómo una pais tan desarrollado se puso sobre sus espaldas a una Europa desigual. A países como Grecia que solo se endeudan y tenían jubilaciones más altas que los mismos alemanes y países como Portugal, España la misma Italia que mucho gastan y poco usan para generar progreso y desarrollo y como ellos otros 20 países de la Unión Europea. En mis viajes a Europa siempre escucho como se quejan de Alemania pero cuando necesitan de su dinero para aliviar sus maltrechas economías bien que ponen la mano y después que hacen? Agradecen? No Prefieren morder la mano que los ayuda y bueno ya no quiero Escribir más porque las notas largas ni ganas de leerlas dan. Saludos y es mi criterio personal.

Andrés Respondió:


23 de noviembre de 2017

15:30:09

Ruben, esa es precisamente la lógica que ha sumergido a Alemania en una crisis política. El establishment político dominante en ese país, el cual representa la Merkel, le ha hecho creer al pueblo alemán, a través del control de los principales medios de información, que ellos son los que han puesto Europa a sus espaldas. Esto no sólo no es cierto, sino que es una lamentable y peligrosa perversión de la realidad. La unión monetaria fue impulsada por Alemania, pues sabían que su poderío industrial acabaría imponiéndose en el resto de Europa. El asunto es que cuando regiones de tan diferente nivel económico adoptan una moneda común, entonces la parte menos desarrollada se ve aplastada. Es un principio conocido que conocen muchos economistas prestigiosos e instituciones de todo tipo. Es como poner a un niño y a un adulto a competir bajo reglas que sólo el adulto está en condiciones de cumplir. Esto sucedió en la zona del Euro: los países menos desarrollados no pudieron acudir a mecanismos tradicionales y conocidos de política económica (como la devaluación, el déficit, o la protección de sus industrias) para socorrer sus economías y protegerlas de los embates de un vecino inmensamente más poderoso. Esto se podría haber evitado si existieran mecanismos de compensación, pero los estatutos de la EU, esgrimidos y creados oportunista e irracionalmente por Alemania, impidieron esto. El resultado fue que los exportadores alemanes se llenaron los bolsillos a costa de la depauperación económica de sus vecinos. Fueron las naciones menos desarrolladas las que se echaron la prosperidad alemana en las espaldas y no al revés. Son estas naciones las que han financiado la prosperidad del capital alemán. El superavit alemán es el resultado de esta política de expoliación. Para colmo, ni siquiera lo repartieron con su pueblo. Hasta que la cuerda se rompe, y la gente expresa su insatisfacción de cualquier modo. Es una crisis justamente por ser el país más grande y económicamente relevante de Europa. Alemania siempre distinguió en la posgerra por su estabilidad. Esta situación que atraviesa ahora es inédita en este período y muestra lo dividida, en algunos casos de modo irreconciliable, que están las fuerzas políticas en esta sociedad, y probablemente en toda Europa. Cuando la cosa está tan dividida, entonces tampoco hay democracia, pues uno de sus fundamentos es precisamente la existencia de objetivos nacionales comunes, independientemente de la diferencia de tácticas. Cuando este equilibrio se rompe sucede lo que sucedió en la guerra civil norteamericana, dónde dos facciones irreconciliables, otrora democráticamente elegidas, se empezaron a masacrar con el objetivo de volver a construir una base común para la sociedad. Recordemos que Hitler llegó al poder por vías “democráticas”. No deberíamos citar a la democracia tan a la ligera. La cosa es un poco más complicada. Sin una clara definición política en ese país, no hay Unión Europea, ni siquiera en su lamentable forma actual. El asunto es tenso pues la extrema derecha se ha convertido en la tercera fuerza política de ese país, y ni siquiera así han conseguido ponerse de acuerdo para proyectar una necesitada imagen de estabilidad al resto de Europa, dónde los fantasmas neofascistas también campean por su respeto. Están divididísimos Ruben. Es una crisis, la cual es un legado directo de los doce años de la Merkel en el poder.

Miguel Angel dijo:

6

23 de noviembre de 2017

08:16:43


Es curioso q existan personas q no reconocen la presencia de una crisis política en Alemania, la gran mayoría de los especialistas, analistas, politólogos y otras personalidades de cualquier tendencia política coinciden en q se presenta. Surgen dificultades, pues la canciller en funciones, Angela Merkel, no logra tejer una coalición de gobierno con liberales y verdes después de su frágil victoria. Los partidos de la oposición se aprovechan de las debilidades surgidas en el bloque conservador CDU/CSU para intentar presionar a favor de los intereses de sus partidos (lucha de poderes). En esta atomización en las fuerzas y opiniones proliferan tales situaciones, tal y como ocurrió en España y en otras "democracias" europeas. Está creado el mecanismo para ello, es parte del proceso de la democracia representativa. Pero por supuesto, les corresponde a los alemanes solucionar la situación. Pero no existe la mas mínima duda q la crisis política está presente, aunque alguien la niegue.

Rogelio dijo:

7

25 de noviembre de 2017

05:16:46


He leido con atencion todas las opiniones y veo que este tema es muy actual y quizas un punto de inflección en el futuro de Alemania y de la Unión Europea, engendrada gracias a las hipotesis y mentiras sociales de aquellos que la crearon con fines particulares ( el sistema financiero europeo y los poíticos de turno). Ya nadie se acuerda de lo que paso con la introduccion del Euro, que entr5e otras cosas sirvio para enrriquecer a los paises más ricos y empobrecer a los mas pobres ya que unificaron la moneda pero no el sistema fiscal y la banca lo que motivo que los oligarcas locales se beneficiasen de los "Creditos y ayudas del sistema europeo" para robar como nunca antes se hizo en europa. Como resultado de esto en el transcurso de solo 15 años el poder adquisitivo de un europeo cae en picado y obliga a la corona inglesa a salirse del euro ( aunque siempre tuvo un pie fuera). Hoy la realidad es que la media de salario medio de un obrero cualificado esta soble los 1000 - 1300 eu. el nivel de gastos y los precios ha aumentado sustancialmente haciendo un peligroso gradiente ascendente al estado de miseria familiar. Esto se observa en todos los paises de la unión y en Alemania se ve agudizado por el éxodo arabe. Claro esta que, este o no planeado, la guerra en los paises arabes provocaria la marcha forzada de millones de personas a europa y principalmente a Alemania donde el nivel de ayuda social es mayor que en otros paises. Todo esto ha provocado el desenlace que se veia venir en Alemania, ahora toca a la UE repartir la miseria entre todos los paises europeos ( menos a Inglaterra que con la astucia de zorro de siempre ha sabido a tiempo poner a buen recaudo su moneda). La otra parte del conflicto es mas preocupante. La musulmanizacion de la sociedad europea dara un nuevo impulso a la radicalización del terrorismo islamista en la región lo que sin duda provocará, como en la edad media sucedio, a la expulsión masiva de arabes en un futuro no muy lejano. En lo económico se veran obligados a levantar las sanciones económicas impuestas a Rusia ( bajo las presiones de sus amiguisimos yankees) para aliviar los mercados y dar respiro a los desempleados europeos.