Por estos días, Vallegrande estuvo colmada de movimientos sociales, artistas, académicos y jóvenes de varias partes del mundo que se dieron cita en esa pequeña ciudad boliviana para recordar los 50 años de la caída en combate de Ernesto Che Guevara.
Vallegrande dejó de ser solamente un nombre en un mapa y ocupó titulares tras el hallazgo allí de los restos del Che en una fosa común, junto a varios de sus compañeros de guerrilla.
Sin embargo, esa ciudad ubicada a 244 kilómetros de La Paz y que es capital de la provincia de Vallegrande en el departamento de Santa Cruz, fue fundada siglos atrás, específicamente en 1612 –cuando Bolivia era aun colonia española– con el nombre de «Jesús y Montes Claros de los Caballeros del Vallegrande».
El territorio, enclavado al borde de la cordillera de Los Andes, se encuentra a poco más de 2 000 metros sobre el nivel del mar y está rodeado de montañas, por lo que su clima varía: es frío en las montañas y templado en los valles.
Santacruz, provincia boliviana a la que pertenece, es la región del país con mayor crecimiento económico de los últimos 50 años, es el departamento más extenso del país, y el más poblado luego de La Paz.
En el caso específico de Vallegrande, colinda con tres de los 56 municipios que tiene Santa Cruz: Manuel María Caballero, Florida y Cordillera.
A pesar de que su población es de menos de 15 000 habitantes, el turismo constituye uno de los sectores más importantes de su economía, y en ese sentido, dos veces al año esa cifra se multiplica: en el mes de octubre y en los primeros meses del año.
En octubre los visitantes se reúnen en Vallegrande para conmemorar otro aniversario de la muerte del Che y realizan una peregrinación a los lugares donde el Guerrillero Heroico pasó sus últimas horas con vida.
El otro momento es durante los primeros meses del año, cuando turistas y vallegrandinos que se mudaron a otras zonas de Bolivia regresan a su ciudad natal para celebrar el carnaval, que tiene una semana de duración.
Durante esos días se realiza un desfile de comparsas, se bebe leche de vaca recién ordeñada combinada con whisky, y los músicos locales recorren las calles con sus acordes.
En ese sitio es utilizado desde la época colonial el español vallegrandino, un dialecto del idioma español, que también es utilizado en otras provincias de Santa Cruz.
Según afirma Pastor Aguilar, a quien se le atribuye la fundación del Centro Cultural de Vallegrande en 1950, hoy convertido en la Casa Municipal de la Cultura y Museo del Che Guevara, «el vallegrandino siempre se ha caracterizado por trabajar, ser amable y hospitalario. Desde hace 50 años se viene trabajando en la cultura y el progreso».

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emilio dijo:
1
11 de octubre de 2017
10:52:42
Roberto Antonio Mendoza dijo:
2
11 de octubre de 2017
14:22:55
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