RAMALLAH.-Más de 1 500 prisioneros palestinos recluidos en cárceles de Israel iniciaron ayer una huelga de hambre indefinida en pos de que les mejoren las condiciones de reclusión y el fin de las detenciones administrativas.
En ocasión del Día de los Prisioneros palestinos, los reclusos se agruparon bajo el lema Libertad y Dignidad en torno a una iniciativa al respecto, presentada por el líder del partido Al Fatah, Marwan Barghouthi, preso desde hace 15 años en cárceles israelíes.
Según medios palestinos, los participantes en la huelga de hambre sacaron todos los productos alimenticios de sus celdas y, como señal distintiva, se afeitaron sus cráneos en las prisiones de Ashkelon, Gilboa, Hadarim, Ktziot, Nafha y Ramón.
Este lunes la oficina del primer ministro palestino, Mahmoud Abbas, emitió un comunicado que contiene la lista de demandas de los huelguistas de hambre.
Los presos palestinos, según el texto, demandan atención a sus «necesidades básicas y sus derechos como reclusos».
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