Más de mil menores migrantes no acompañados serán trasladados desde hoy a centros de acogida de diversas localidades de Francia, como paso final del desmantelamiento del campamento irregular de la ciudad norteña de Calais.
Tras la evacuación y el desmontaje de la aglomeración donde se acumulaban más de seis mil indocumentados, unos mil 500 niños y adolescentes fueron alojados en centros de recepción provisionales situados en la misma localidad.
De acuerdo con la prefectura de Paso de Calais, a partir de este miércoles los menores serán transferidos a centros de acogida donde permanecerán mientras se estudian los casos.
Una buena parte de ellos mantiene la intención de viajar al Reino Unido, pues allí los esperan familiares, pero las autoridades de Londres solo están admitiendo el ingreso de un número muy reducido.
De acuerdo con el presidente galo, François Hollande, los que no puedan viajar a la nación británica, pasarán al cuidado de los servicios franceses de protección a la infancia.
Por otro lado, el mandatario aseguró la víspera que no habrá nuevas concentraciones de migrantes en la ciudad norteña de Calais, donde ya fueron demolidos todos los refugios improvisados que conformaban el campo de indocumentados.
El campamento 'fue evacuado y será asegurado, nadie podrá volver a instalarse', aseguró el mandatario en entrevista con el diario regional La Voix du Nord.
Los últimos restos de la aglomeración fueron destruidos el lunes, como paso final luego de una amplia operación iniciada hace una semana que permitió evacuar a casi seis mil foráneos en más de 400 centros de acogida distribuidos por todo el país.
De acuerdo con Hollande, 'la operación fue conducida de manera humana y digna, y también de forma eficaz'.
Solo se mantienen en pie la iglesia y la mezquita improvisadas por los migrantes, para que puedan ser visitadas los menores que permanecen en la zona
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