ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
La operación Barbarroja comenzó un 22 de junio hace 75 años. Foto: DW

En la madrugada del 22 de junio de 1941, Alemania comenzó la invasión a la Unión Soviética (URSS), por sorpresa y sin una declaración oficial de guerra. Bajo el nombre de Barbarroja, Adolfo Hitler envió a tropas germanas a una operación militar contra la URSS en medio de la Segunda Guerra Mundial.

Ambas naciones habían firmado en agosto de 1939 un pacto de no agresión, ni de forma individual  ni en alianza con otros estados. También incluía no apoyar a otro tercer país que pudiera atacar a la otra parte del pacto, entre otros aspectos. El pacto Ribbentrop-Mólotov tendría una duración de diez años.

Según expertos, tanto Hitler como Josehp Stalin, líder de la URSS, sabían que esta cierta paz no duraría y un enfrentamiento era inevitable.

Con la operación Barbarroja, Hitler pretendía avanzar simultáneamente con tres ejércitos para cercar a las tropas soviéticas en una campaña relámpago de pocos meses. Tres millones de hombres y 3 400 tanques avanzaron organizados en estos ejércitos. El grupo norte partiría hacia Leningrado, el sur hacia Ucrania y el central hasta Moscú.

Junto a las fuerzas militares germanas participaron tropas de Italia, Finlandia, Eslovaquia, Hungría y Rumanía. Además se incorporaron voluntarios de Croacia, Bélgica, Francia y España.

La invasión causó cierte sorpresa en un inicio y el Ejército alemán obtuvo grandes victorias, que les permitieron llegar a las afueras de Leningrado y Moscú. Sin embargo, a pesar del gran número de tropas hitlerianas y estos éxitos, el alto mando alemán no analizó factores como las bajas temperaturas, los grandes territorios a recorrer y la falta de comunicaciones, señala Europa Press.

¿Qué condujo a la derrota de la invasión? Muchos señalan al clima como un elemento clave en el final de la operación Barbarroja. Según relata la agencia de noticias europea, las temperaturas alcanzaron los 50 grados bajo cero.

El Ejército alemán no estaba preparado para enfrentar las duras condiciones meteorológicas, ni para una guerra de larga duración que llevó al alto mando alemán a enfrentar problemas con la alimentación, la vestimenta y  las armas de los soldados.

El Ejército soviético sobrepasaba al alemán por un gran margen en cantidades de soldados, números de tanques y aviones, así como en la calidad armamentista. Por ejemplo, los modelos de tanques T-34 y KV-1 y aviones Sturmovik eran técnicamente mejores, según artículos de prensa.

Pero entender el giro que dio la Segunda Guerra Mundial en este frente resulta imposible sin valorar la valentía de los pueblos soviéticos y la firmeza del liderazgo político y militar del primer país socialista en la historia de la humanidad.

A estos factores se le suma la reorganización y el enfoque de toda la nación soviética a defender su patria, pero también el rápido desarrollo de su industria de guerra.

Por su parte, el Ejército soviético se recuperó de la sorpresa inicial y bajo la dirección del Mariscal Gueorgui Zhúkov —uno de los grandes estrategas rusos—, se consolidaron las tropas de la URSS y recuperó territorios.

Zhúkov hizo retroceder a las tropas alemanas en Leningrado y más tarde, cuando los alemanes se encontraban a 25 kilómetros de Moscú en diciembre de 1941, se encargó de la defensa de la capital.

El Mariscal conocía que Japón no estaba dispuesto a atacar el flanco siberiano de la URSS lo que le convenció para transferir la gran mayoría de las reservas del Este y concentrarlas en secreto cerca de Moscú.

Las bajas temperaturas y la llegada de tropas de Siberia provocaron la retirada germana. Al oeste de la capital rusa, se produjo entonces la llamada batalla de Moscú, en la cual fue imposible que las tropas de Hitler recuperaran las posiciones perdidas.

Según los historiadores, la operación Barbarroja llegó a su fin el 5 de diciembre de 1941 con el fracaso en la conquista de Moscú y ante la imposibilidad de lograr la rendición de los soviéticos en Leningrado.

Ese fracaso no significó el fin de la invasión nazi a la URSS. La batalla de Stalingrado, entre agosto de 1942 y febrero de 1943, es otro ejemplo.

Según RT, esta contienda bélica superó todas las batallas anteriores por su duración y encarnizados combates. Se de­sarrolló en un territorio enorme de 100 000 km² y en dife­rentes etapas. En ellas participaron más de dos millones de efectivos, 2 000 tanques, 2 000 aviones y 26 000 piezas de artillería.

Una vez más, como en las batallas anteriores, se demostraría el heroísmo del pueblo soviético. La URSS fue el país con más víctimas en la Segunda Guerra Mundial. Más de 26 millones de personas murieron, de las cuales solo alrededor de ocho millones eran militares.

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Karel dijo:

21

24 de junio de 2016

19:40:20


El artículo, aunque parece muy positivo, tiene varios errores históricos que hacen eco a la propaganda occidental sobre la Segunda Guerra Mundial, para disminuir el mérito de la URSS en la victoria contra el nazismo. Primero, no fueron tres ejércitos. Fueron TRES AGRUPACIONES DE EJÉRCITOS, Norte, Centro y Sur, mandadas por tres de los más exitosos mariscales de campo nazis, bajo la dirección general del mariscal Walther von Brauchitsch, quien fue destituido luego del fracaso frente a Moscú. Segundo, no fue el invierno lo que derrotó a los nazis frente a Moscú y más tarde, sino la superioridad del arte militar soviético, y la tremenda unidad del pueblo soviético ante el invasor, que además de conquistar territorios, se dedicó a exterminar a la población, dejando a los sobrevivientes como esclavos. Tercero, en el momento de la invasión, eran los nazis los que tenían superioridad numérica en los sectores de choque principales, y además una gran superioridad en armamento estratégico, como tanques y sobre todo aviones. La mayor parte de la aviación soviética del momento eran cazas de mediados de los 30, muy inferiores a los Messerschmidt y a los Junkers 87 o Stuka, bombarderos en picado de gran precisión. Pasarían varios meses antes que los soviéticos sacaran buenas cantidades de los La-3, La-5, los Pe y los famosos bombarderos Il-2. Esos aviones más modernos venían creándose, pero no se habían producido en masa. Fue DURANTE LA GUERRA, que la producción de armamento se multiplicó y llegó, tras mucho esfuerzo por parte de TODA LA POBLACIÓN, a igualar y luego superar a la maquinaria de guerra hitleriana. Sugiero al periodista que lea un poco más de esa guerra, la más importante de la Historia Universal, antes de escribir un artículo de tanta importancia histórica. La Operación Barbarroja no terminó con la derrota ante Moscú, pero sí fue cambiada de raíz, así como los comandantes de los Frentes. Luego de la tremenda debacle ante Moscú y el contraataque soviético en el Frente central u Occidental, la maquinaria de guerra hitleriana se concentró en avanzar por el Sur, para cortar las vías de suministro soviéticas de combustible y otros recursos provenientes del Cáucaso y a través del Volga. La desinformación puede hacer que aceptemos mentiras dichas por el imperialismo occidental, sin darnos cuentas. Saludos.