Extradición de El Chapo a Estados Unidos a la espera

CIUDAD DE MÉXICO.—Tras la concesión de un juzgado de la Ciudad de México de suspender temporalmente la extradición de El Chapo el pasado viernes, la justicia ha dado un plazo de dos días para que el Ministerio de Exteriores presente un informe en el que justifique que se cumple el tratado de extradición firmado entre ambos países.

De no recibir este documento, el juzgado señaló que se celebraría una audiencia el próximo 2 de junio, explicitó el Consejo de la Judicatura Federal, según el diario El Mundo.

La defensa del narcotraficante Guzmán Loera conocido como El Chapo presentó un amparo contra la decisión del Gobierno mexicano de trasladarlo preso a Estados Unidos. Con este amparo, El Chapo se resiste a ser extraditado a ese país norteño, donde tiene al menos siete causas abiertas.

El Chapo presentó el recurso el pasado jueves, una semana después que el traslado del reo fuese autorizado por el Ministerio de Exteriores. Una medida que, a juicio de sus abogados, “pisotea” la Constitución y va contra el Estado de De­recho.

A la vez que tratan de eludir la extradición, los abogados del narcotraficante trabajan para alcanzar algún tipo de acuerdo con Estados Unidos para que en caso de que sea trasladado al país vecino pase el menor tiempo posible en prisión, señaló El País.

El Chapo Guzmán se declarará culpable en caso de ser extraditado a Estados Unidos y buscará lograr un acuerdo con las autoridades de ese país para recibir una pena mínima, aseguró su abogado José Refugio Rodríguez.

El líder del cártel de Sinaloa no buscará someterse a un juicio porque hay antecedentes de que los narcotraficantes que han optado por esa vía han terminado con severas penas. “Es un hecho que si lo extraditan él se declarará culpable de los cargos que existen en su contra allá porque de otra forma tendría que enfrentar un juicio donde se discutiera su culpabilidad y la experiencia nos dice que todos los que en su situación se han ido a juicio les ha ido muy mal”, explicó.

Es la tercera ocasión en la que el líder cártel de Sinaloa ha sido encarcelado y esta vez el Gobierno mexicano lo quiere lejos de la zona en la que es influyente. Mientras gestiona la extradición ha rodeado al narcotraficante de importantes me­didas de seguridad, agregó El País.

El proceso de extradición podría tardarse entre uno y tres años. El gobierno de Peña Nieto no está dispuesto a dejarse sorprender de nuevo, por otra fuga de este narcotraficante que en el 2001 se escapó del penal de Puente Grande en el estado de Jalisco (oeste) y en el 2015 de la cárcel del Altiplano, en el estado de México (centro), para lo cual construyó un túnel de 1 500 metros conectado con el plato de la ducha.