NOM PEN.—Camboya celebró ayer el aniversario 37 de la victoria sobre el régimen genocida del Jemer Rojo, con una ceremonia en la que se resaltó la valentía y el sacrificio de los combatientes y el pueblo para ese fin, informó PL.
El primer ministro y presidente del gobernante Partido Popular de Camboya, Hun Sen, afirmó que con el triunfo, el país cerró el capítulo más trágico de su historia y abrió una etapa de independencia, libertad, democracia y progreso social.
Añadió que entonces el pueblo camboyano reivindicó todos sus derechos y se convirtió en dueño de su destino.
Hun Sen recordó que los miembros del Frente de Solidaridad Nacional para la Salvación de Camboya, fundado el 2 de diciembre de 1978, combatieron junto a los soldados vietnamitas.
A propósito de los soldados vietnamitas, Hun Sen reconoció su apoyo en la lucha contra el régimen encabezado por Pol Pot, responsable del genocidio de millones de personas entre 1975 y 1979.
Sin la victoria del 7 de enero, no tendríamos lo que hoy tenemos en Camboya. El 7 de enero es el día de la resurrección del pueblo. Esta verdad histórica es bien conocida y está grabada en la mente de los camboyanos de una a otra generación, resaltó.
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