
Muy pronto el yuan chino podría convertirse en una divisa internacional, respaldado nada más y nada menos que por la segunda economía global.
La directora general del Fondo Monetario Internacional (FMI), Cristine Lagarde, propuso hace poco incluirlo en la canasta de monedas de reservas del FMI.
Este anuncio de la rectora de la principal entidad prestamista constituye, entre otras cuestiones, un reconocimiento al cambio que se registra desde hace años en el mapa económico mundial, así como al ascenso de China como potencia.
Para muchos economistas, este constituye un paso lógico y necesario. Se trata de otorgarle al yuan el lugar que se merece como unidad monetaria del gigante asiático, uno de los países que más rápido crece en la actualidad y que en pocas décadas podría desbancar a EE.UU. del liderazgo económico global.
El “renminbi”, como realmente se llama el yuan, ha superado el valor del dólar canadiense y del australiano, para convertirse en la quinta moneda más fuerte del mundo.
Si bien esta propuesta de Lagarde debe ser ratificada por la Junta Ejecutiva del FMI en una reunión el próximo 30 de noviembre, el procedimiento que resta parece ser solo un trámite, luego del apoyo de la propia directiva, de los Estados Unidos, en septiembre, y los méritos que ha hecho la moneda en el mercado.
Estos pronósticos se adelantan incluso a las perspectivas de China. Hace muy pocos días, el gobernador del Banco Central del gigante asiático, Zhou Xiaochuan, anunció una serie de reformas económicas y financieras en los próximos cinco años, con vistas a convertir al yuan en una moneda internacional para el 2020.
China representa casi el 10,6 % de las exportaciones mundiales, el doble que las de Japón o Reino Unido, y contradictoriamente a finales del 2014 su moneda solo constituía menos del 1,1% de las reservas internacionales en poder de bancos.
Además solo el 2 % de los pagos globales se hacen en yuanes. Por lo que la propuesta para que el yuan se convierta en una divisa de cambio internacional e integre la canasta de los Derechos Especiales de Giro (DEG) del FMI, es una reivindicación del peso del gigante asiático.
La canasta DEG son los activos de reserva internacional asignados a los países miembros del FMI como complemento de sus reservas internacionales.
Según la web del organismo son, además, una especie de moneda internacional, no vinculada a país alguno, para las transacciones entre ellos y con el propio FMI, que actualiza esta cesta de divisas cada cinco años.
Así, el yuan entraría a este selecto grupo, actualmente integrado por el dólar estadounidense, el euro, el yen japonés y la libra esterlina, para convertirse en una alternativa al emporio financiero dominado por las potencias occidentales.
Si bien la diferencia entre el yuan y el dólar estadounidense es evidente, más del 44 % de los pagos internacionales se ejecutan en la moneda de EE.UU.; no pasa lo mismo con el resto del dinero. En todo el 2014 los desembolsos en yuanes crecieron más del 100 % frente a solo un 4 % del euro, el yen japonés y la libra esterlina juntos.
Igualmente, para que la moneda china adquiera estatus de divisa internacional y se convierta en una verdadera reserva existen dos requisitos que debe cumplir. La primera es tener un peso importante en el comercio internacional, aspecto que el yuan ha resuelto. En segundo lugar, se exige que esa unidad monetaria pueda ser usada libremente; en este sentido el gobierno de Xi Jinping aseguró que están dando pasos financieros sustanciales para garantizar el empleo sin restricciones de su moneda.
En la actualidad el yuan es utilizado en gran medida por los países del BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) y en las actividades del Banco Asiático de Inversiones en Infraestructura (BAII). De acuerdo con el economista estadounidense, Samuel Rines, citado por Telesur, toda esta actividad financiera le facilita su transición hacia el estatus de moneda de reserva mundial.
China tiene ante sí un reto muy grande. Pero este paso sería clave en el apuntalamiento de las grandes transformaciones que hace el gigante asiático para asegurar su desarrollo.















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Jose cuervo dijo:
1
19 de noviembre de 2015
23:40:43
FASV dijo:
2
20 de noviembre de 2015
11:30:56
MIGUEL ANGEL dijo:
3
20 de noviembre de 2015
12:16:25
jorge dijo:
4
21 de noviembre de 2015
06:21:36
marcelino dijo:
5
21 de noviembre de 2015
13:35:35
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