Hungría prepara militarización de su frontera con Serbia para impedir paso de refugiados

BUDAPEST, Hungría- Las fuerzas militares húngaras iniciaron ejercicios el miércoles cerca de la frontera con Serbia con el objetivo de reforzar su frontera ante la oleada de inmigrantes que llegan a su país proveniente de Oriente Medio, informa el diario estadounidense New York Times.

La participación del ejército en la vigilancia de la frontera, donde se construye un muro que se suma a la valla de 170 kilómetros de longitud recientemente terminada, está sujeta a la aprobación de un proyecto de ley en el Parlamento este mes. El número de migrantes de la zona no ha mostrado señales de disminuir, y los funcionarios militares húngaros han dicho que el ejército iba a ayudar a asegurar las fronteras del país.

Según reseña la página digital del Público, el ministro de Defensa István Simicskó, que asumió ayer su cargo tras la reciente dimisión de su antecesor, ha asegurado que pronto se reforzará la vigilancia de la frontera con hasta 4 mil militares. "Enviaremos 3 mil o 4 mil soldados a la frontera, incluyendo reservistas", adelantó Simicsko ante la comisión de Defensa del Parlamento húngaro.

En lo que va de año, unas 170 mil personas, la mayoría refugiados de zonas en conflicto en Oriente Medio, han entrado en Hungría. Gran parte de ellas desea cruzar cuanto ante el país y seguir camino hacia Austria y luego Alemania, el destino final deseado para casi todos. 

Las autoridades interceptaron ayer a 3 mil 321 refugiados que entraron en el país, lo que significa un nuevo récord, informó hoy la policía húngara. Para los próximos días se calcula la llegada de otros 40 mil.

Por otro lado Austria ha suspendido el servicio de trenes en la línea que conecta con Hungría, debido a la "masiva sobrecarga" de trenes procedentes de este país que transportan a cientos de refugiados que quieren llegar a Viena y continuar luego su viaje hacia Alemania, según ha informado el diario El País.

Durante la noche, más de 3.000 personas han cruzado a pie la frontera entre Hungría y Austria, y otros 1.000 han llegado sobre el mediodía.

El pasado miércoles en la propia frontera, la periodista húngara Petra Laszlo golpeó y puso zancadillas a los refugiados que escapaban del cordón policial para introducirse en Hungría, protagonizando una de las escenas más vergonzosas de la crisis migratoria.