Este 15 de agosto se celebran los 70 años de la independencia de la República Popular Democrática de Corea (RPDC) de Japón. A partir de aquí el pueblo coreano comenzó a escribir su propia historia al librarse del colonialismo.
El año 1945 significó un nuevo renacer para Corea que se encontraba ante el dilema de sobrevivir o sucumbir a una sistema dominante que amenazaba con destruir su propia existencia.
Bajo la conducción de Kim IL Sung, Corea inició un nuevo camino hacia la liberación total del país y la construcción de una sociedad digna para sus habitantes. Durante 15 años los coreanos habían desplegado una lucha armada que labró el sendero hacia la victoria. Así, el 10 de octubre de 1945 se fundó el Partido del Trabajo de Corea, organizador y orientador del triunfo.
En el proceso por establecer las bases de esta nueva sociedad se creó el poder popular y en un corto periodo de tiempo se realizaron la reforma agraria, la nacionalización de las industrias más importantes y la concesión a las mujeres, que tanto habían sufrido durante la etapa colonialista, de los mismos derechos que los hombres.
A partir de su liberación Corea emprendió su viaje hacia el socialismo, a base de políticas populares y nombrando al pueblo como verdadero regente del estado. Así tres años más tarde, el 9 de septiembre de 1948, se fundó la República Popular Democrática (RPD) de Corea.
Este nuevo estado estaría dirigido por dos doctrinas fundamentales planteadas por el líder Kim IL Sung: la Juche, que esboza que el dueño del destino es uno mismo, así como la fuerza que lo forja, y la Songun, basada en la necesidad de priorizar los asuntos militares.
Corea Democrática ha mantenido durante muchos años, invariable, su idea de un gobierno socialista que prioriza la unidad de sus miembros. Defiende la idea de conservar su autonomía en cuestiones como la ideología, la política y la economía.
En la actualidad, y pese a la batalla para mantener inerte un sistema socialista, la RPD de Corea no retrocede ni un paso en sus sueños iniciales y trata de insertarse con éxito en las dinámicas modernas.
Nuestro país posee históricos vínculos con la RPDC. Las estrechas relaciones se han ratificado a lo largo de estos años, especialmente este 2015 con la visita a La Habana del ministro de Relaciones Exteriores, Ri Su-Yong.
Este año se cumple el aniversario 55 del establecimiento de relaciones bilaterales entre ambas naciones, cuyos vínculos históricos están basados en la amistad, fraternidad y estrecha colaboración.
Todos estos logros otorgan un sentido histórico al proceso de liberación de un país que puso su destino en manos del pueblo.















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Miguek dijo:
1
17 de agosto de 2015
12:59:16
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