
Los resultados finales de las elecciones federales de medio término en México aún están por revelarse, debido a ciertas incongruencias que exigieron una nueva fiscalización de boletas, pero ya queda claro que hay interesantes cambios en la geopolítica nacional, en la cual redujo su influencia de manera significativa el Partido de la Revolución Democrática (PRD), históricamente de izquierda, pero con autoridades municipales involucrados en actividades impropias de sus cargos.
Para analistas, tuvo gran peso en la baja del nivel de votos del PRD el que un alcalde de ese partido fuera responsable de la desaparición forzada de 43 estudiantes en Ayotzinapa, en Guerrero.
Ese suceso que estremeció a México hizo que por vergüenza renunciara el líder del Partido, el prestigioso político Cuauhtémoc Cárdenas, lo cual fue aprovechado por otras fuerzas políticas tradicionales para una campaña de desprestigio ante la población, que emigró en sus votos el pasado 7 de junio.
Ese día, un pueblo desencantado por el desempeño político de sus principales autoridades en todos los niveles, la conocida relación narco-política en varios estados, la pobreza que asola a una mayoría del campesinado, la rebelión del magisterio contra la reforma educativa, entre otros ítems, viró la espalda a las urnas en un alto abstencionismo. De los 83 millones de convocados solo participaron 36.7 millones.
Las elecciones determinaban la renovación de los 500 miembros de la Cámara de Diputados, nueve gobernadores y más de mil autoridades municipales, además de renovar congresos en 17 de las 32 entidades federativas del país. También se escogieron los jefes de cada una de las 16 delegaciones en que está dividida la Ciudad de México.
De “falla técnica” se calificó por los consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE) de México los datos erróneos conocidos el 11 de junio.
Un editorial del periódico La Jornada refirió que la revisión impuesta del 60 % de los paquetes electorales en México es resultado de las malas prácticas durante la votación, y que un recuento de esa magnitud se debe “ a la actitud omisa de las autoridades electorales, las cuales no actuaron frente a violaciones flagrantes a la legislación correspondiente”.
La Jornada plantea que “la amplia porción de casillas con impugnaciones e inconformidades deja entrever la mala preparación organizativa y las fallas en la capacitación del personal y de los ciudadanos que estuvieron a cargo de los centros de votación”. Ese domingo (7 de junio, n.r) hubo decenas de denuncia de fraudes y amenazas a los electores.
Fuentes cercanas al proceso electoral estiman que este fue el más costoso de la historia. Los contribuyentes mexicanos aportaron mil 400 millones de dólares (equivalente de 21 mil millones de pesos mexicanos) para su celebración.
Analistas recuerdan que los meses previos a las elecciones estuvieron matizados por la violencia, en especial en Oaxaca, donde fueron atacadas sedes partidistas y boletas quemadas. Desde que se convocaron a las elecciones, al menos 21 personas vinculadas a estos comicios fueron asesinadas, entre ellos más de 15 postulados de distintas agrupaciones.
EL PRI ES EL GANADOR, PERO…
Las tendencias indican que el ganador de las elecciones es el oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI) del presidente Enrique Peña Nieto, a pesar de que ha sido blanco de críticas púbicas por diferentes motivos, entre ellos el caso Ayotzinapa, y sus aliados el Partido Verde y el Nuevo Alianza, que juntos mantienen la mayoría en la Cámara de Diputados.
En segundo lugar quedó el derechista Partido Acción Nacional, y en tercero el PRD, que debido a las divisiones internas, entre otros errores, sufrió el peor revés de su trayectoria.
Los números conocidos hasta ahora que favorecen al PRI pueden resultar engañosos, pues en una segunda lectura puede comprobarse que en México ya comienza a vislumbrarse una nueva geopolítica.
En esta ocasión, y como un aviso, partidos nuevos o alternativos quebraron la dicotomía electoral del PRI y el PAN, y la posición del PRD como la más importante fuerza de la izquierda mexicana.
Que el PRI haya ganado no constituye una sorpresa, pues cuenta con una aceitada maquinaria electoral, alta membresía, y cifras millonarias para gastar en campañas comiciales.
Pero si es un importantísimo resultado de los escrutinios que la nueva formación de izquierda Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), partido liderado por el ex candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, en su primera incursión electoral obtuvo casi el 9% de los votos, le ganó al PRD la mayoría de los diputados en la Ciudad de México y conquistó cinco de las 16 delegaciones de esta demarcación.
Con un mínimo de costo, dada la austeridad de su campaña, MORENA se colocó en el primer lugar en la capital de la nación y se consolidó con fuerte presencia en más de la mitad de los estados mexicanos.
Ello indica que es una agrupación con la cual tendrá que medir fuerzas la partidocracia tradicional de México, ya que es una posibilidad de la izquierda in crescendo, mucho más después del desmembramiento del PRD.
Dos partidos, el del Trabajo y el Humanista tienen posibilidades de perder el registro electoral al no alcanzar el 3% de la votación, según el Instituto Nacional Electoral.
Hasta el cierre de esta edición, el oficialista PRI ganaba en cinco gobernaciones, mientras el PAN obtuvo dos, y una el PRD.
La gran sorpresa la dio Nuevo León, el estado más industrializado y uno de los más ricos del país, cuando el candidato independiente Jaime Rodríguez, conocido como “El Bronco” ganó tamaña cantidad de votos, que superó los del PRI y el PAN juntos..
Lo importante de que Rodriguez haya obtenido la victoria es que por primera vez México aceptó formalmente candidatos independientes, lo que puede dejar atrás la partidocracia tradicional, de la cual ya parece harta una buena parte de la ciudadanía.
El gobernador electo desestimó la amenaza de muerte en su contra que difundió el colectivo de ciberactivistas Anonymous, y aseguró: “no es de criminales, sino de grupos políticos preocupados por mi triunfo. No creo que sea de la delincuencia organizada, porque esos no te avisan. El que te avisa es porque quiere generarte terror, pero yo estoy curado de espanto”. Su propio hijo murió víctima de la violencia.
Rodriguez dijo pretende atemorizarlo para que no actúe contra los corruptos a los que advirtió que encarcelará si les detecta desvío de recursos, a partir del 4 de octubre, cuando tome posesión. En el 2011, cuando ejercía como alcalde del municipio García, el futuro gobernador sufrió dos ataques consecutivos –febrero y marzo- del grupo criminal Los Zeta, en la que murieron delincuentes y escoltas del político.
Además del líder electo de Nuevo León, otros dos postulados independientes también reconocidos por los organismos comiciales ganaron dos diputaciones federales, lo cual abre una vía importante para ese sector de cara a las presidenciales del 2018.
No obstante los resultados, que traen nuevas posibilidades a candidatos independientes y a Morena, hay que considerar también que el PRI y sus aliados aún controlan la Cámara Baja. Expertos consideran que a pesar del movimiento geopolítico, continuarán las llamadas reformas estructurales y la entrega de importantes recursos nacionales a las empresas trasnacionales y los oligopolios locales, el hambre y también las relaciones política-narcotráfico y la violencia, en especial en las zonas rurales.
No puede olvidarse que el oficialismo mantiene el respaldo del gran capital financiero nacional y extranjero, en especial de Estados Unidos y Canadá, una situación que aunque ha llevado a la ruina a agricultores y pequeños empresarios no podrá ser cambiada.















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